Los candidatos de Izquierda-Ezkerra al Congreso y al Senado han apostado por una política medioambiental "planteada y ejecutada desde la concienciación y el compromiso con el medio ambiente, lejos y resguardada de la influencia de los intereses empresariales, financieros y políticos".

"Queremos un modelo de política ambiental que nos siga dando, a nosotros y a las generaciones venideras, un futuro de prosperidad, bienestar y vida", ha destacado el cabeza de lista de Izquierda-Ezkerra al Congreso de los Diputados, Pablo Archel, que ha participado este sábado junto a Jordi Dalmau y otros candidatos y dirigentes de la coalición en un acto político en el pueblo viejo de Ansoáin.

Archel ha incidido en que "debemos tener como prioritarias aquellas políticas que nos lleven a un futuro de prosperidad y trabajo ligadas a la sostenibilidad y a la conservación de un medio ambiente, sin el cual, ninguna tecnología nos permitiría existir".

Ha insistido en la "necesidad" de "llevar la producción energética hacia un modelo basado en fuentes de energía renovables y limpias" y ha exigido "el cierre y desmantelamiento de la centrales nucleares" porque "por mucho que nos quieran engañar, ni son rentables, ni son seguras, ni son necesarias".

En este sentido, ha abogado por "encaminar las políticas industriales hacia un modelo respetuoso con el medio, con medidas que eviten la generación de residuos tóxicos y la emisión de gases contaminantes". "Somos el 8º emisor de gases contaminantes a los niveles bajos de la atmósfera. No podemos seguir con un modelo que pone en riesgo, tanto nuestro entorno, como nuestra salud", ha sentenciado.

Asimismo, ha reivindicado la "necesidad" de "un uso de los recursos naturales responsable, de la reutilización y reciclado" y ha criticado "la voluntad de imponernos el arcaico sistema de incineración, como medio de eliminación de residuos".