La consellera de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua, Maritina Hernández, ha subrayado este miércoles el Consell "va a seguir defendiendo el mantenimiento del trasvase Tajo-Segura de manera firme y enérgica, como hemos hecho hasta ahora, porque su agua es clave para la agricultura y la economía de la Comunitat Valenciana y, por tanto, para nuestro futuro".

Hernández ha mantenido una reunión con la Comunidad de Regantes de San Felipe Neri. En el encuentro con los regantes de Crevillente (Alicante), se ha abordado la concesión de una subvención de 2,7 millones de euros por parte de la Conselleria para un proyecto de ahorro de agua de riego sobre una superficie de 1.200 hectáreas que beneficiará a 1.500 agricultores, según ha informado la Generalitat en un comunicado.

La titular de Agricultura ha destacado que el 62 por ciento de la agricultura alicantina, que genera una riqueza de 575 millones de euros, depende de los aportes hídricos procedentes del río Tajo, "lo que le confiere un carácter absolutamente estratégico".

También ha defendido el trabajo de los agricultores alicantinos "por hacer competitiva una actividad económica, que dejaría de serlo si un factor indispensable para la producción como es el agua deja de llegar en cantidad y calidad suficiente y a un precio que permita un margen de beneficios".

En este sentido, ha aseverado que del trasvase Tajo-Segura dependen 70.000 empleos en la provincia de Alicante, da servicio a 40.000 regantes y garantiza el abastecimiento del sistema que da servicio a un millón de personas en toda la provincia.

"Son datos que demuestran el impacto que tiene para el conjunto de la economía y los sectores productivos de Alicante como el turismo, puesto que los municipios abastecidos concentran también el 20 por ciento de la oferta de alojamiento turístico y el 50 por ciento de oferta de segunda residencia de uso turístico", ha resaltado.

En cuanto al nuevo proyecto para ahorrar agua de riego en explotaciones agrícolas de Crevillente, consiste en el acondicionamiento de 1.735 metros de canal de hormigón armado y la construcción de un camino asfaltado de servicio de dos metros de ancho, paralelo al trazado del canal, que supondrá una inversión de 5,4 millones de euros, al ser un proyecto cofinanciado al 50 por ciento entre la Conselleria y la comunidad de regantes.

Esta medida se une a otras iniciadas en los últimos años por los regantes de Crevillente, como el entubado de más de 18 kilómetros de acequias, que evita la evaporación del agua, y la construcción de una balsa reguladora de riego, de 4.354 metros cúbicos, cuyo presupuesto ha ascendido a 1,9 millones de euros, según el Consell.

La inversión en modernización de regadíos en la provincia de Alicante alcanza los 85,3 millones de euros desde 2007, apoyada con una financiación de 42,7 millones de euros de la Conselleria de Agricultura. En el mismo período, en la comarca del Baix Vinalopó se realizaron inversiones de 3,8 millones de euros en cinco proyectos, que la Conselleria de Agricultura apoyó con 1,9 millones de euros.