La cabeza de lista del PSC por Lleida y vicepresidenta primera del Congreso, Teresa Cunillera, ha calificado este lunes de "sangrante" lo que ha denominado apagón que afectará durante las vísperas de festivos y puentes hasta ocho centros hospitalarios de referencia en Catalunya, entre ellos el Hospital Arnau de Vilanova de Lleida.

Ha afirmado, refiriéndose a CiU, que "uno puede optar por perdonar un impuesto que afecta al 6% de la población, como es el impuesto de sucesiones, y recortar el Estado del Bienestar, o hacer lo que hace un gobierno socialista, que es recaudar de los que más tienen y no de los que menos tienen".

Sobre la situación en la que se encuentran centros como el Hospital Arnau de Vilanova, con quirófanos cerrados y sólo con servicios básicos de urgencias, ha apuntado que "hay que hacer una llamada de alerta, porque estas decisiones tienen una intencionalidad política y de beneficiar a unos pocos en detrimento de la mayoría".

En este sentido, ha añadido que la decisión del Instituto Catalán de la Salut (ICS) es "la demostración más clara del proyecto que la derecha piensa llevar a cabo en este país".

Cunillera también ha recordado que en lo que va de año han aumentado un 23% las listas de espera, volviendo a la situación de 2004.

Ha ironizado con que el conseller de Salud, Boi Ruiz, no ha engañado nunca: "Desde el primer momento ya dijo que nos hiciéramos de una mutua, supongo que por deformación profesional", ha remarcado.

Por su parte, el concejal de salud de la Paeria y Secretario de organización de la agrupación del PSC de Lleida, el médico Oriol Yuguero, ha explicado que hace un año Catalunya tenía el tercer mejor sistema de salud, por detrás sólo de Noruega y Canadá, una situación que contrasta con la actual: "Ahora somos la penúltima comunidad del Estado", ha aseverado.