Diego Z.L., el acusado de matar a su expareja en Horna (Guadalajara) el 9 de diciembre de 2008 por no aceptar que quisiera cortar la relación, ha declarado durante el juicio no recordar nada de lo sucedido.

Durante la vista celebrada en la Audiencia Provincial de Guadalajara, el procesado ha asegurado que el día de los hechos acudió a recoger a la joven M.M.M.A. para hablar con ella, y ha asegurado que fue ella quien le propuso ir al paraje donde fue hallada muerta.

Una vez allí, y tras ver unas fotos, el acusado dice no tener ningún recuerdo. "No recuerdo nada de lo que pasó. Vengo aquí para que me juzguen".

Admisión implícita

Según ha dicho, sólo recuerda despertar en el lugar de los hechos y regresar a su casa para coger la escopeta de su padre para volver al paraje donde yacía M.M.M.A. y suicidarse, algo que finalmente no fue capaz de llevar a cabo, por lo que huyó sin rumbo tan sólo con el dinero que le había dado su "hermano por haber trabajado en el bar".

El acusado ha asegurado que a la altura de Huesca paró y pensó en entregarse pero no tuvo valor y continuó hasta Francia, donde usó su tarjeta de crédito creyendo que así le localizarían en breve, según ha dicho.

A preguntas sobre las declaraciones en las que admitía haber cometido el delito tras ser detenido, Diego Z.L. ha afirmado que "era la primera vez que estaba en una comisaría y dije que sí a muchas preguntas", aunque reconoce su firma en la declaración. Esta tarde está previsto que continúe el juicio con la declaración de varios testigos.