Alcaldes de la Franja, municipios aragoneses que lindan con Catalunya, han reclamado este jueves a la Generalitat que siga atendiendo a los pacientes de la zona en el Hospital Arnau de Vilanova de Lleida, y han alertado del error que conllevaría levantar fronteras donde, a su juicio, nunca las ha habido.

"Creemos que es necesaria esta atención que hemos recibido desde que el mundo es mundo. Querer poner una frontera donde no ha existido nunca es una equivocación, un error muy grande", ha asegurado el alcalde de Fraga, Santiago Escandil.

Desde hace unos meses, el Hospital Arnau de Vilanova atiende las primeras visitas de los aragoneses, y deriva las posteriores a los centros de atención primaria de Huesca.

Los ediles han aprovechado la visita que han realizado a la feria de servicios urbanos Municipalia, en Lleida, para pedir una solución dialogada entre la Generalitat, el Ministerio de Salud y el Gobierno aragonés.

Los alcaldes sostienen que el desplazamiento a Barbastro, la ciudad en la que está su hospital de referencia, es muy complicado, en especial para quienes dependen del transporte público.

"En Mequinenza, por ejemplo, cuando se deriva aun paciente a un hospital de referencia, que es Barbastro, hay un problema tremendo porque no tenemos transporte público para poder acceder allí", ha asegurado su alcaldesa, Magda Godia.

"La gente de Mequinenza tiene que recurrir a familiares y amigos, a caridad de que alguien los quiera transportar", ha agregado.

El alcalde de Lleida, el socialista Àngel Ros, ha invitado a participar en Municipalia a los alcaldes Candasnos, Zaidín, Altorricon, Aren, Alcampell, Albelda, Puente de Montañana, Al presidente del Consejo comarcal del Bajo CincaTorrente de Cinca, al presidente del Consejo Comarcal de la Litera, Altorricon, Binefar, Camporrells, Tamarite de Litera, Vencillón, al presidente del Consejo Comarcal de la Ribagorza, Benabarre, Bonansa y Sopeira, además del alcalde de Fraga y a la de Mequinenza.

Durante la visita, Ros ha afirmado que la Franja es un territorio "amigo y hermano", y ha reiterado su apuesta por el diálogo y el trabajo conjunto para resolver cuestiones como el litigio por el arte que reclama el Obispado de Barbastro al de Lleida u la atención sanitaria en los municipios de esta zona.