Los coches que contaminen menos pagarán un importe más bajo en los peajes. La Generalitat de Cataluña quiere aplicar un descuento del 20% en las vías de acceso en Barcelona: en la C-16, la C-33 y la C-32 en el Maresme y el Garraf. Los túneles de Vallvidrera estrenarán la medida en enero y, a parte de la reducción para los vehículos que tengan menos emisiones de Dióxido de Carbono (CO2), se aplicará un incremento del coste a los coches más contaminantes.

PEl conseller de Territorio y Sostenibilidad, Lluís Recoder, anunció este lunes los descuentos en los peajes para los vehículos menos contaminantes. Esta es una de las medidas incluidas en el nuevo Plan de calidad del aire, que cuenta con una treintena de propuestas para  rebajar los niveles de contaminación, situados por encima de los umbrales establecidos por la Unión Europea.

Los descuentos del 20% se aplicarán a partir del 1 de enero en los Túneles de Vallvidrera y después, progresivamente en la C-33 y la C-32, tanto en el Maresme como en el Garraf.

Los límites aplicables

La reducción se practicará a vehículos de gasoil que emitan menos de 108 gramos de CO2 por kilómetro. Para los coches de gasolina, el umbral estará situado en 120 gramos de CO2/km emitidos. En la práctica, esto quiere decir que unos 80 modelos de los que actualmente se pueden adquirir en el mercado cumplirán este requisito.

Los vehículos híbridos y los coches eléctricos entran en esta clasificación. Se estima que cerca del 8% de la flota de vehículos del área metropolitana de Barcelona está dentro de estos parámetros.

"No pedimos a la gente que cambie de coche, sólo estamos diciendo que quien tenga un coche menos contaminante pagará un 20% menos", aclaró este lunes Recoder. El objetivo del Plan es que el parque móvil se vaya renovando con vehículos menos contaminantes en los próximos años. Los particulares son quienes deben solicitar la bonificación, que se aplicará a través del pago por Vía-T o telepeaje.

Vehículos antiguos

Desde la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB), su vicepresidente, Jordi Giró, aplaude "las políticas de corresponsabilidad" y la implantación de medidas para "mejorar la calidad ambiental". Ahora bien, considera que la bonificación se tendría que aplicar después de un periodo transitorio de unos dos años para que los propietarios de los vehículos antiguos y contaminantes pudieran buscar alternativas y conseguir que la medida "no sea lesiva para los quien tienen pocos recursos" económicos.

"No debemos caer en el error de financiar la movilidad en vehículo privado, aunque sea eléctrico", advertía este lunes el presidente de la Asociación para la Promoción del Transporte Público, Ricard Riol, que, sin embargo, elogiaba la medida de premiar a quien emita menos CO2 .