Este arrojo, sin embargo, es lo poco que las distingue de sus progenitoras. Y es que, a pesar de que con el paso de los años la información sobre sexo es cada vez más abundante, las dudas y los mitos que tienen estas chicas son muy parecidos a los que arrastraban sus madres cuando se iniciaron en las relaciones sexuales.

Errores comunes

Muchas siguen confiando en que la primera vez no hay riesgo de embarazo, otras creen que lavando la zona genital tras el coito, tampoco. Y hay quienes preguntan si con la penetración anal se pueden quedar preñadas, afirma Cecilia Neri, del Centro Xove de Alecrín, que imparte charlas en institutos de Vigo.

Con tan exiguos conocimientos, se explica que el principal método contraceptivo sea el de ensayo-error y que se recurra a menudo a la marcha atrás. «Los adolescentes rechazan los anticonceptivos hasta que se llevan un susto», dicen en el Centro de Orientación Familiar.

Eso sí, cuando piden una píldora poscoital en el Centro Xove, el 80% dice que se le ha roto el preservativo, aunque el porcentaje de roturas real se aproxime al 0,1%.

Clichés machistas

Los modelos sexuales de las películas y las telenovelas perpetúan ideas machistas, como que el hombre que más sexo práctica es el mejor y que sexo es igual a coito. «En esto los orientales, con el sexo tántrico, sensitivo, nos llevan mucha ventaja», apunta Neri.

Leyendas sobre la menstruación

Muchas jóvenes de hoy siguen pensando que si hacen una mayonesa cuando tienen el periodo hay muchas posibilidades de que la salsa se corte. También que si riegan las plantas, éstas pueden marchitarse y perecer. Son falsas creencias que perduran sin explicación.