El secretario general de Ferrmed, Joan Amorós, ha implorado este miércoles a la Junta de Andalucía que esté presente el próximo 21 de septiembre en la cumbre organizada por esta asociación en Bruselas para defender el Corredor Mediterráneo como eje prioritario de la Red Transeuropea de Transportes, toda vez que esta comunidad sería "la más beneficiada" por la infraestructura.

Amorós ha realizado esta petición en rueda de prensa en Granada antes de participar en el acto que se ha organizado en la Cámara de Comercio de esta ciudad en apoyo al Corredor Ferroviario Mediterráneo, al que han asistido representantes de las principales organizaciones empresariales y sindicales, así como del Gobierno central, además de numerosos alcaldes de la provincia.

Según ha relatado el secretario de Ferrmed, los presidentes de la Comunidad de Murcia, Comunidad Valenciana, Cataluña y Baleares ya han confirmado su asistencia y ve necesario que también acuda un representante institucional de Andalucía para demostrar que hay unidad de criterio de todas las regionales españolas en la defensa del corredor.

Además, ha advertido al Gobierno andaluz que el 80 por ciento de las inversiones previstas se ejecutarían en Andalucía, unos 11.700 millones de euros para la línea que discurra por el litoral de la comunidad y más de 3.500 millones para la conexión interior Lorca-Granada, aún sin incluir en la propuesta de Fomento.

Firmeza en fomento

Amorós también ha aprovechado la cita con los medios para "exigir firmeza" al Gobierno central y reclamarle que envíe un documento oficial a la Unión Europea en el que se comprometa a hacer las inversiones necesarias para que este trazado ferroviario esté operativo antes de 2030.

Éste "es uno de los requisitos" necesarios para que la Comisión Europea pueda incluir en su propuesta del 20 de octubre el trazado del Corredor Mediterráneo "al completo" y por el momento —hasta el 6 de septiembre— "no había llegado nada a la Comisión" en este sentido.

Preguntado por los periodistas por los posibles motivos que pueden llevar al Gobierno central a mostrar reticencias respecto de este corredor, el secretario general de Ferrmed ha descartado que se trate de un asunto económico y lo ha atribuido a condicionantes políticos.

"Da la sensación de que este corredor da miedo" ante la posibilidad de que se lleve "todo el crecimiento socioeconómico" hacia el litoral mediterráneo, ha opinado Amorós, que ha lamentado que algunos políticos mantengan una mentalidad "radial" respecto a este proyecto pese a que sus repercusiones beneficiarían a todo el país.

El Corredor Ferroviario Mediterráneo es uno de los principales ejes de transporte de la Península Ibérica de casi 1.300 kilómetros, entre la frontera francesa y Algeciras (Cádiz), sobre el que se articula. Discurre por cuatro comunidades autónomas —Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía— y afecta también a Palma de Mallorca, por la importancia de su puerto y como principal vía de acceso de mercancías a las Islas Baleares.

El proyecto defendido por Ferrmed, que supone una inversión de 51.300 millones de euros de los que ya están en marcha 32.000, supone una línea de doble vía —cuatro carriles— desde Estocolmo hasta la Comunidad Valenciana que, una vez en Lorca (Murcia) se dividiría. Desde allí dos de estas líneas férreas continuarían por el interior hasta Granada y las otras dos lo harían por la costa hasta Algeciras (Cádiz).

En la actualidad, la conexión Lorca-Granada no está incluida en la presentación que el Ministerio de Fomento hizo ante la Unión, y este asunto comienza a ser urgente, según Ferrmed, porque la mayoría de los Estados Miembros ya han llegado a un acuerdo respecto a sus preferencias.