La Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet, ha pronosticado un repentino aumento de las temperaturas que se dejará sentir especialmente el próximo viernes, 9 de septiembre.

Según Euskalmet, el episodio tiene su origen en la presencia de altas presiones en gran parte de Centro-Europa y el Mediterráneo, a las que hay que sumar una depresión circulando por el Atlántico frente a las costas de las Islas Británicas. Esta situación provocará que el aire más cálido procedente del centro y sur de la Península se desplace hacia el norte.

La Agencia Vasca de Meteorología añade, además, que el viento de componente sur impedirá que se produzcan brisas en la costa. Con esta situación, las temperaturas máximas previstas para la jornada del viernes 9, podrían situarse de forma generalizada entre los 33 y los 36 grados, por lo que el Departamento de Interior ha decidido activar el aviso amarillo por temperaturas extremas.

En cuanto a su incidencia en zonas concretas es probable que las temperaturas máximas ronden los 33 grados en la zona costera, los 36 grados en el Cantábrico interior, los 35 grados en la zona de transición y los 36 grados en la zona del eje del Ebro.

En opinión de Euskalmet, lo más probable es que se trate de un episodio puntual y que a lo largo del sábado, día 10, con el giro de viento de componente sur al oeste-noroeste, esta masa de aire cálido sea reemplazada por otra más fresca proveniente del Atlántico.

Posteriormente, a partir del 12 de septiembre, es posible que las temperaturas vuelvan a repuntar y a acercarse a estos valores de calor, "aunque todavía es pronto para confirmarlo", ha concluido Euskalmet.