El sindicato CCOO ha estimado este lunes que la paralización de obra pública incluida dentro del Plan de Garantía de los Servicios Sociales Básicos que fue anunciado por la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, afectará directamente a 10.000 trabajadores y reducirá el PIB de la región en un 2,1 por ciento.

Así lo ha asegurado en rueda de prensa el secretario general de la Federación de Construcción y Madera (FECOMA) de CCOO, Julio Ugena Carrasco, acompañado por el secretario provincial del sindicato, Jesús García Villaraco, señalando que la cifra de 10.000 empleados se podría ver "multiplicada" porque "cuando se deja de mover dinero en un sector tan importante, esto arrastra a otros muchos".

La paralización de la obra nueva supondrá también, según Ugena, que la región deje de recibir fondos europeos para obras como las que se han paralizado ya, en referencia a los hospitales de Cuenca y Guadalajara.

En este sentido, Ugena ha denunciado que esta paralización de obras publicas se contrapone a la mejora de la obtención de fondos europeos anunciada en el Plan de recortes del Gobierno, algo que, sumado a los 1.800 millones que Cospedal ahorrará, podría llevar al "empobrecimiento para la región".

El representante de FECOMA ha explicado que si se pierde este plan de ayudas europeas será muy difícil de recuperar porque son unas subvenciones "que tienen fecha de caducidad" en el 2013.

Por su parte, García Villaraco ha señalado que las estimaciones de CCOO están basadas en estudios económicos que desvelan que si se estaba esperando un 0,7 por ciento del incremento del PIB en la región, la retirada que 700 millones de euros para la obra nueva puede llevar "en cuatro o cinco meses a un proceso de recesión en Castilla-La Mancha".

De esta forma, García Villaraco ha explicado que el endeudamiento "no tiene por qué ser malo" si se utiliza "con rigor" y que en estos momentos puede ser más necesario el estímulo de la economía que el ahorro, puesto que "hacer una sangría a una economía anémica es contraproducente".

Hospital de toledo

Por otro lado, el sindicato también ha denunciado la paralización "casi absoluta" de la obra del Hospital de Toledo por la realización de un "quinto modificado" que afectará al presupuesto y al proyecto de esta construcción.

García Villaraco ha explicado que actualmente solo trabajan en esta obra unas 100 personas, fundamentalmente de la estructura de la Unión Temporal de Empresas (UTE), cuando debería haber en torno a otros 450 empleados más.

Desde el punto vista de la sanidad, García Villaraco ha sentenciado que "no es de recibo que se perpetúe una obra" cuando el Hospital Virgen de la Salud está saturado, por lo que ha exigido al SESCAM que se realicen las gestiones necesarias para desbloquear esta situación.

En relación a este asunto, Ugena ha señalado que se pueden estar viendo afectados directa o indirectamente unos 700 trabajadores, pudiendo quedar también sin trabajo otros 60 empleados de los 100 que aún trabajan en la obra en un plazo de 15 días.

Ugena ha asegurado que esta paralización está afectando también a las empresas implicados porque algunas ya "han hecho inversiones" en la construcción del centro sanitario y esa paralización les "lleva a destruir empleo y a una situación económica negativa porque tienen que hacer frente a esas inversiones".

Ugena ha asegurado que se trata de un problema de "falta de gestión", puesto que la paralización de la obra no se puede achacar a problemas económicos heredados del anterior Ejecutivo, ya que, según el representante del FECOMA, los fondos para este proyecto están asegurados.