El acto de conciliación que se ha celebrado este martes en los juzgados vigueses por una demanda interpuesta por la presidenta de Galicia Bilingüe, Gloria Lago, contra Galiza Nova —por presuntas calumnias e injurias—, ha terminado sin acuerdo.

La vista de este martes se ha celebrado después de que Gloria Lago interpusiera una demanda por las críticas sobre su persona y su actividad profesional publicadas en un boletín de Galiza Nova. Por esos hechos, la presidenta de Galicia Bilingüe pedía una indemnización de 30.000 euros, la misma cantidad que ha había reclamado en una demanda anterior por los mismos presuntos delitos.

La secretaria xeral de Galiza Nova, Iria Aboi, y el abogado de la organización, Gonzalo Castro, ha señalado que las reflexiones publicadas en ese boletín responden a una "crítica legítima ante actitudes intolerantes con el uso del gallego". Así, enmarcan lo publicado en el ejercicio de la libertad de expresión, y reiteran su denuncia de la actitud "discriminatoria" hacia la lengua gallega por parte de Lago y la entidad que preside.

Al acto de conciliación de este martes no acudió la demandante, quien ya había anunciado hace una semana que no estaría en el juzgado ya que, en su vida privada, pretende "evitar en lo posible" encontrarse "con quienes llegan a este grado de maldad". Gloria Lago denuncia que "desde hace cuatro años sectores que, por motivos políticos o económicos, defienden la imposición lingüística" tratan de que ella abandone su "actividad en favor de la libertad de elección de lengua".

Durante la mañana, en el exterior del juzgado vigués y como muestra de apoyo a Galiza Nova, se ha celebrado una concentración en la que han participado, entre otros, el diputado autonómico del BNG, Henrique Viéitez; la responsable comarcal del BNG, Manuela Rodríguez; o la secretaria xeral de A Mesa, Iria Taibo.