La unidad 12 del Urbos3, una más de las previstas para la flota de tranvías de la I Fase, ya está lista para iniciar sus pruebas en vía. Lo hará en horario nocturno, para no afectar al servicio comercial, a partir de esta noche.

Las pruebas se prolongarán durante todo el mes de agosto. Una vez finalicen, la unidad podrá utilizarse para el transporte de viajeros como las 11 restantes, informan desde Los Tranvías de Zaragoza.

Durante las pruebas, se debe cumplir el protocolo de rodaje establecido. En él, se analizan la tracción, los distintos sistemas de frenos, los dispositivos de comunicaciones y seguridad, así como aspectos como el billetaje o la información al viajero, todo en condiciones reales.

Análisis con dummies

Dentro de los trabajos de investigación y nuevos desarrollos que realiza CAF en colaboración con el Tranvía de Zaragoza, se han llevado a cabo distintas pruebas de seguridad con dummies similares a los que se utilizan para prácticas médicas y análisis automovilísticos.

Estos muñecos cuentan con todos los miembros y articulaciones del cuerpo humano, pudiendo conocerse los daños que se producen en una colisión. Así mismo, se ha analizado la seguridad pasiva del vehículo en caso de impacto con peatones.

Las pruebas han servido para recoger más datos sobre cómo reacciona el dispositivo antiarrollamiento del Urbos3 en condiciones extremas, con el fin de poder perfeccionarlo en el futuro. Para ello se ha contado con dos muñecos que emulan las condiciones físicas de un adulto de 1,65 metros y un niño de 1,20.

Se colocaron en distintas posiciones (de pie, tumbados en las vías, con el cuerpo parcialmente en la plataforma). La Unidad alcanzaba una velocidad de 25 km/h (mayor a la media que alcanza en servicio comercial normal) y a los 4 metros del obstáculo el conductor frenaba de emergencia. De este modo, se ha logrado simular la situación en la que una persona aparece por sorpresa en las vías.

En todas las pruebas realizadas, el dispositivo antiarrollamiento del Urbos3 ha permitido que los dummies no se queden bajo la unidad, sino que sean arrastrados a lo largo de unos metros. De esta manera, se reduce notablemente la gravedad de las lesiones, en caso de producirse un accidente.

Los expertos de CAF indican que los resultados han sido muy positivos, y de su análisis detallado se extraerán mejoras que permitan perfeccionar el sistema en nuevos modelos con objeto de reducir todavía más el impacto de un atropello. Así mismo, al tratarse de un dispositivo por piezas, cualquier nuevo desarrollo es factible de ser implementado en el Tranvía de Zaragoza.

Medidas de seguridad

El sistema antiarrollamiento es uno de los dispositivos de seguridad pasiva incorporados al Urbos3. Además, el Tranvía de Zaragoza cuenta con una placa dentada en el frontal de la cabina que sirve para que en un choque con otra unidad, los dos testeros engarcen y no se produzca el encabalgamiento de un tranvía con otro.

Detrás de esa placa, el Urbos3 incorpora un dispositivo que absorbe la energía en caso de impacto. Esto permite que los daños en cabina se reduzcan notablemente, preservando la integridad del conductor y amortiguando el impacto de tal forma que los pasajeros sean sometidos a menor deceleración. Así mismo, la cabina monocasco está rodeada por un cabecero metálico, que protege al habitáculo de impactos, tanto frontales como laterales.

Dentro de los elementos de seguridad que incluye el Tranvía de Zaragoza, un papel fundamental lo juega el sistema CAS-E de control de agujas y señales. Se basa en unas balizas que detectan el paso del tranvía, así como su velocidad.

En el caso de que ésta sea más elevada de lo establecido, por ejemplo, para tomar una curva próxima, el sistema avisa al conductor para que reduzca la velocidad. En caso de no corregirse, la unidad se detiene automáticamente.

De este modo se consigue que las unidades no puedan entrar en una curva a más velocidad de la permitida y que tampoco accedan a una zona de cambio de agujas cuando éstas están cerradas en el sentido de su circulación.

Entre las medidas de seguridad incorporadas por el Urbos3 también se incluye el sistema de 'Hombre Muerto'. Para circular con una unidad de Tranvía, es necesario que el conductor accione con su pulgar un pulsador ubicado en la palanca de tracción cada 5 segundos. En caso de no realizarlo, el dispositivo lanza un aviso acústico y, si el conductor no reacciona, se detiene el tranvía con suavidad.