La asamblea local del BNG de Ourense ha dado luz verde por mayoría, con el 74 por ciento de apoyo de los votos emitidos, a la apertura de negociaciones con el PSdeG que lidera en la ciudad Francisco Rodríguez para reeditar el bipartito municipal, fórmula con la que han gobernado en los últimos cuatro años, según ha ratificado a Europa Press el responsable local, Xosé Carballido.

En las pasadas elecciones del 22 de mayo, el BNG obtuvo tres concejales, frente a los seis que tenía en 2007; mientras que PPdeG y PSdeG consiguieron 11 cada uno. Además, entró una nueva formación política en la ciudad, Democracia Ourensana, con dos representantes en la corporación local.

Así, la asamblea de este jueves, que se ha prolongado durante unas tres horas y media, ha refrendado la postura del consello local que entendía que, según explicó su responsable, Xosé Carballido, responde a una lectura de los resultados en la que los ciudadanos quieren que "siga un gobierno de progreso". De esta manera, los nacionalistas interpretan que el gobierno municipal con los socialistas "fue útil", y que hay que trabajar en beneficio de la ciudad y "por encima de los intereses" de la formación.

Con esta decisión, los nacionalistas de Ourense se convierten en los primeros dispuestos a formar parte de un gobierno de coalición liderado por un regidor socialista, ya que este miércoles sus compañeros de Vigo aprobaron en asamblea quedarse fuera de las responsabilidades de gobierno, aunque sí apoyarán al candidato socialista a la Alcaldía, Abel Caballero, en su investidura.

Además, esta decisión se enmarca en la autonomía que Consello Nacional celebrado el pasado sábado en Santiago dio a las localidades para que cada una decidiese en asamblea emprender negociaciones o no hacerlo para formar bipartitos locales con el PSdeG.

En declaraciones a Europa Press, el responsable local del BNG en Ourense ha explicado que ahora se abrirá un periodo de negocaciones que, ante la "entente cordial" que se vio en los últimos días la ciudad de As Burgas, entiende que podrá rematar en un bipartito local, aunque hay que esperar a que fructifiquen esos contactos.

El debate en la asamblea ha sido muy intenso y, en él, los nacionalistas han analizado el resultado electoral, que ha supuesto la pérdida de tres concejales al BNG frente a la cita anterior. "No supimos rentabilizar la acción de gobierno, ellos lo hicieron bien y nosotros mal a este nivel", ha analizado Carballido, matizando que ello no era una crítica al PSdeG, sino una reflexión acerca de los aspectos que se deben mejorar.

"cierto grado de división"

Además, otras de las razones que se pusieron encima de la mesa, de entre las "50 que puede haber", ha sido "el cierto grado de división interna", algo que —ha reconocido— "la sociedad penaliza" en las organizaciones políticas.

Por ello, y tomando como punto de partida el Consello Nacional —máximo órgano de decisión entre asambleas del BNG—, los nacionalistas ourensanos también aprovecharon este jueves para ratificarse en la necesidad de emprender el camino que se "generó" el pasado sábado en Santiago para hacer efectiva la "voluntad" de devolver la "unidad" al nacionalismo.