Cita nocturna con la voz

Desnuda y sin trucos. Así es la última gira de Joan Manuel Serrat, en la que se sube al escenario sólo con su guitarra y la compañía de un piano.
Ricard Miralles acompaña al piano a un Serrat dispuesto a implicar al público en su música.
Ricard Miralles acompaña al piano a un Serrat dispuesto a implicar al público en su música.
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Ricard Miralles acompaña al piano a un Serrat dispuesto a implicar al público en su música.
Serrat vuelve a la ciudad tras dejar atrás una dura enfermedad y, por tanto, un alejamiento forzoso de su carrera. Un parón que le sirvió para echar la vista atrás y comenzar a cimentar el camino hacia adelante. Y todavía está en ello. En mayo del pasado año inició un gira en la que hace malabarismos con su carrera sin ningún tipo de red.

Se trata de 100x100 Serrat, un espectáculo en formato de recital en el que el cantautor se presenta casi desnudo, con su voz como

único escudo. Los acordes de su guitarra lo acompañan, mientras Ricard Miralles pone la sintonía al piano.

De tú a tú

Una propuesta tranquila y sin estridencias con la que Serrat busca la conexión con el público, mantener una charla de tú a tú con sus seguidores. Un acercamiento que permite un dinamismo inusual en sus conciertos e incluso ciertos aires de improvisación. Porque esta gira no sólo es para él. Además de repasar sus éxitos, Serrat también quiere dar las gracias al público.

* Palacio de la Ópera. Glorieta de América, s/n. Mañana, a las 21.00 horas. Las entradas cuestan 21, 24, 27 y 30 euros.

Un músico con honores

Si la gira 100x100 Serrat está siendo todo un éxito tanto en España como en Iberoamérica, no sólo él está dispuesto a repasar su carrera. La Universidad Complutense de Madrid también pensó en él y el pasado día 15 lo invistió doctor honoris causa en un acto en el que Serrat cambió la guitarra por la toga.

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