Según Puig, «no se trata de uno, sino de algunos casos» de rescisiones laborales y despidos y bastantes de desplazamiento laboral. El portavoz de CiU se mostró convencido de que «alguien romperá este clima de terror» y denunciará públicamente estos casos.

Por su parte, el secretario de organización de ERC, Xavier Vendrell, defendió el envío de las misivas y aseguró que las seguirán usando para pedir a todos los cargos designados por su formación que contribuyan con su sueldo a la financiación del partido. Además, recordó que estas cartas sólo se mandaron a este tipo de cargos (209), aunque admitió que podrían haberse enviado más de las debidas.

El secretario general de ERC, Joan Puigcercós, lamentó las críticas de CiU, ya que tienen el «récord estatal de donaciones anónimas», con 4,1 millones de euros.

Carod recibe el alta médica

El presidente de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, abandonó ayer el hospital Joan XXIII de Tarragona, donde permanecía ingresado desde el pasado viernes por una angina de pecho. A su salida reconoció que últimamente ha «forzado la máquina».