El joven fue atado el pasado viernes, según adelantaron hoy los periódicos provinciales de Cádiz, y el lunes por la tarde pudo hacerse con un móvil con el que llamó a la Policía Local, que acudió a la casa y, mediante un cortafríos, lo liberaron y animaron a que denunciara a su padre.
Así, ese mismo lunes el chico acudió a la Comisaría de la Policía Nacional y declaró contra su padre, que fue detenido el martes por la mañana. Ayer por la tarde, en compañía de su madre, ratificó la denuncia y el juzgado de instrucción número tres de San Fernando ordenó el ingreso de L.A.C. en la mencionada prisión de preventivos.
A raíz de estar atado en la cama, el joven presentaba varias lesiones, aunque también tenía contusiones, erosiones y hematomas por todo el cuerpo por agresiones anteriores del padre al que no denunció antes porque por su minoría de edad --tiene 18 años recién cumplidos-- "no sabía que debía hacer".
Las desavenencias entre padre e hijo tienen su origen en que este último no trabajaba ni estudiaba y, aunque partió a Cartagena (Murcia) para ingresar en Infantería de Marina, se volvió al día siguiente.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios