La compañía cervecera Heineken invirtió "más de 50 millones de euros más en la nueva fábrica de Sevilla que las plusvalías obtenidas de la compraventa de las antiguas instalaciones de la capital hispalense y de las ayudas públicas recibidas", según han destacado a Europa Press fuentes de la compañía.

Las fuentes han reiterado su apuesta y su compromiso por la permanencia de las instalaciones en Sevilla y han asegurado que "no existe 'ningún fondo de reptiles' relacionado con la compañía", en

respuesta a una información publicada en 'El Mundo' que alude a que la cervecera "cobró 16,5 millones del 'fondo de reptiles' pese a ganar 279 millones con la venta de terrenos".

En ese sentido, fuentes de la compañía han precisado que los 16,5 millones de euros "se han notificado lícitamente dentro del marco del proceso de reinversión que hicimos en Sevilla y se efectuó para la ejecución del plan social", de forma que "no hubo ningún uso ilícito".

Han explicado que el plan social incluía convertir a 75 trabajadores discontinuos en fijos y han agregado que ese dinero "no fue recibido por Heineken sino que se depósito por una compañía aseguradora, elegida tras un concurso público para garantizar las condiciones acordadas con los sindicatos en el ERE".

Asimismo, han indicado que "previamente a esos 16,5 millones Heineken había aportado 57 millones de euros a ese depósito".

Las fuentes han destacado que Heineken "adquirió el compromiso visible de seguir en Sevilla y reinvertir las plusvalías en la nueva fábrica", para lo cual, según refirieron, "se invirtieron 300 millones de euros y posteriormente se ha invertido más dinero en esta fábrica", de forma que "se han invertido más de 50 millones de euros más de lo que recibimos por la compraventa de terrenos y por las ayudas públicas".

Además, han agregado que aparte de la nueva fábrica "hemos destinado bastantes millones en reacondicionar nuestras antiguas oficinas" y han precisado que "existía un acuerdo con el Ayuntamiento de Sevilla por el cual no se recalificarían los terrenos hasta que no entrara en funcionamiento la nueva fábrica".

"La fábrica de Sevilla es la más moderna de Europa y la más sostenible medioambientalmente", han destacado las fuentes, quienes han precisado que un estudio universitario apunta que esta nueva fábrica ha generado directa o indirectamente unos 2.025 empleos, de manera que "esta fábrica ha generado un gran impacto de empleo en Andalucía, se ha convertido la factoría en una referencia".

De esta forma, han destacado que esa inversión "ha generado un efecto positivo en la ciudad, pues la nueva fábrica es la mayor inversión efectuada por una compañía privada en la historia de Sevilla," y constituye "una referencia como modelo de producción cervecero sostenible", además de "dejar buenos terrenos para la ciudad".