El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Granada y candidato a la Alcaldía de la capital, Francisco Puentedura, ha criticado que el equipo de gobierno, del PP, negocie de forma unilateral con los hosteleros la ordenanza que regula la colocación de estufas y veladores en las terrazas sin consultar a los vecinos, que son quienes "sufrirán" esta "privatización" de la vía pública.

Puentedura asegura que "el Ayuntamiento sólo tiene en cuenta a quien es usufructuario de la vía pública y desprecia el derecho de los ciudadanos a disfrutar de las calles de sus barrios".

"Es evidente que el PP sólo entiende la vía pública como un lugar donde se puede hacer caja sin tener en cuenta que las ordenanzas municipales tienen que velar siempre por facilitar la convivencia entre los ciudadanos", añade Puentedura, a cuyo juicio la instalación de terrazas en las plazas y calles de la ciudad requiere además un control sobre la ocupación de espacios de la que el Ayuntamiento, simplemente, se ha desentendido.

Ha augurado que esto traerá perjuicios para los usuarios de la vía pública que en ocasiones ven dificultado su tránsito por algunas de esta instalaciones. Por ello, ha instado al equipo de gobierno a consensuar con las asociaciones de vecinos las decisiones que afecten a sus barrios, especialmente las de aquellas actividades que pueden ocasionar ruidos y molestias como es el caso.

Estética y seguridad

Estas declaraciones se producen después de que el Ayuntamiento y el sector hostelero culminaran a principios de mes la redacción de la ordenanza que regulará la instalación de estufas y veladores en la vía pública.

El documento, que será aprobado en Junta de Gobierno Local para agilizar su tramitación, recoge los criterios estéticos y de seguridad que deberán cumplir los hosteleros, los cuales se basan en buena medida en las normativas europeas que ya existen en esta materia.

Así, y para evitar decantarse por un fabricante concreto, el Ayuntamiento reclamará como requisito indispensable que las estufas colocadas junto a bares y restaurantes cumplan las condiciones de seguridad y las distancias mínimas que exige la Unión Europea. Además, los empresarios deberán contratar a un perito industrial que certifique la legalidad de estas instalaciones.

Respecto a la colocación de barriles o taburetes, se permitirán un máximo de dos por cada establecimiento siempre que la acera sea lo suficientemente ancha como para que estos elementos no obstaculicen o impidan el paso de los peatones.