Lo contaba ayer emocionado a 20 minutos Gabilondo, de 58 años, que puede presumir de ser el primer cirujano del mundo en diseñar e intervenir un faldón abdominal de tales dimensiones, que erróneamente se atribuyó a un tumor en medios ajenos al médico.

«No puedes llevar un enfermo a una aventura. Lo máximo que encontramos publicado aludía a mondongos de ventitantos kilos. Fuimos como los primeros que viajaron a la luna. Tenían su planteamiento, pero no un viaje anterior para copiar», explica el cirujano.

¿Cómo se puede generar un colgajo de 60 kilos? La paciente había adelgazado pero «el monstruo» seguía en ella. «Cuando estás tan gorda, se debilita la pared abdominal, queda como papel de fumar y se hace una bolsa. Fue a más, y cuando las tripas salen por ahí, se meten en el faldón que ella tenía por gorda. Y, como nunca se tumbaba porque se asfixiaba, se fue inflando de líquido dentro de la grasa».

Para la ciencia, es un acaso excepcional, para la mujer, el regreso a la vida.