El Gobierno endurecerá la inspección y las sanciones al empleo sumergido

  • Se perseguirá a los empresarios que no den de alta a sus trabajadores y a los trabajadores que perciban retribuciones no declaradas.
  • La detección del empleo irregular es una de las medidas propuestas por Zapatero en Bruselas para cumplir el Pacto del Euro.
Imagen de archivo de unos trabajadores en una fábrica de coches.
Imagen de archivo de unos trabajadores en una fábrica de coches.
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Imagen de archivo de unos trabajadores en una fábrica de coches.

El plan para hacer aflorar el empleo sumergido que aprobará el Gobierno en abril incluirá un "fuerte endurecimiento" de las sanciones a los empresarios que no den de alta a sus trabajadores y a los trabajadores que perciban retribuciones no declaradas.

Según han avanzado fuentes del Ejecutivo, la Inspección de Trabajo va a dedicarse de forma prioritaria a la detección del empleo irregular entre abril de este año y diciembre de 2012, periodo durante el que estará vigente el plan.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, incluyó este programa contra el empleo irregular en el paquete de medidas que presentó la pasada semana ante el Consejo Europeo celebrado en Bruselas para cumplir el Pacto del euro.

Aunque Zapatero habló en Bruselas de incentivos, las fuentes del Ejecutivo han destacado el endurecimiento de las sanciones para hacer eficaz el plan.

Ante el pleno del Congreso en el que ha presentado las conclusiones del Consejo Europeo, Zapatero ha destacado la importancia de esta iniciativa que aprobará en abril el Consejo de Ministros, porque existe una bolsa "significativa" de empleo sumergido que genera perjuicios al conjunto de la economía.

El empleo irregular, ha apuntado, perjudica a las empresas que cumplen con la legalidad, que se enfrentan a una competencia desleal, y a los empleados que no cotizan, que están exentos de protección social y laboral, pero supone sobre todo un perjuicio para la Seguridad Social.

"Ha llegado el momento de que tomemos alguna medida para poner esto negro sobre blanco" e intentar solventar este problema de "manera equilibrada", ha apuntado.

Según ha explicado, se pondrá en marcha un proceso de regularización "razonablemente incentivado y, si no se produce esa regularización, las consecuencias serán graves".

El portavoz de CiU, Josep Anton Duran i Lleida, le había pedido en concreto una reforma de las prestaciones por desempleo, al considerar que una parte de los parados rechaza puestos de trabajo porque "está mejor en la situación de paro".

Zapatero le ha avanzado que habrá medidas en ese ámbito y que se endurecerán las consecuencias para quienes están cobrando una prestación por desempleo y, mientras, trabajan de forma irregular.

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