Mónica González, divulgadora de aceptación corporal: "Las gordas tenemos más sentido del humor, lo hemos desarrollado para sobrevivir"

La gordofobia es un tipo de discriminación que sufren muchas mujeres por su cuerpo. Mónica González, terapeuta y activista, explica cómo empezar a aceptar tu cuerpo y los obstáculos a los que se tienen que enfrentar las mujeres consideradas gordas. 

Mónica González.
Mónica González.
Aportada por Mónica González
Mónica González.

Mónica González es una terapeuta de autoestima conocida por su activismo en las redes sociales, donde trata temas como la gordofobia y la aceptación bajo el nombre de @sanamente.monica. Organiza retiros por toda España en los que ayuda a que las personas se reconcilien con sus cuerpos a través de la mirada y el movimiento. 

Por si no fuera poco ya, también compagina sus tareas de coach con ser actriz de teatro. Durante todo este verano ha sido una de las protagonistas de 'Madres', una comedia que habla de las luces y sombras que conlleva la maternidad. 

La aceptación corporal, un camino difícil pero posible

Mónica González es un ejemplo de mujer que ha tenido que luchar contra el estigma y la discriminación. Hace unos años, confiesa que para ella era impensable llevar un bikini o cumplir una de sus mayores pasiones, el baile: “Me apunté a jazz, que era lo que me gustaba y el profesor me dijo que me había confundido y que era una clase de danza. Yo en ese momento no sabía tanto. Lo pasé fatal y tenía ganas de llorar todas las clases. Luego, en clase de yoga, me dijeron que si me podía poner detrás porque si me ponía delante no veían a los demás. Me apunté a bailes de salón porque era un sitio seguro con personas mayores”. Más tarde, fue a terapia y empezó a reconstruir su relación con su cuerpo, combinando esas sesiones con dar el paso de apuntarse a una escuela de danza profesional. Según ella, esto fue un cambio enorme: “Empecé a reconciliarme con mi cuerpo porque me di cuenta de todo lo que podía hacer con él”.

Me entraban ganas de abrazarme y decirme a mí misma que no me merecía lo que me estaban haciendo

Sin embargo, no fue un camino fácil y el tratamiento médico le hizo abrazar y añorar cosas del pasado: "Hice una dieta con médico a base de batidos de proteína y verdura blanca y verde y me quedé fatal. Adelgacé muchísimo y todo el mundo me premiaba. Iba a las tiendas y la ropa me cabía, pero yo sabía que se me estaba cayendo el pelo y que tenía la cara triste. Cuando adelgacé tanto, me veía en las fotos como gorda y me entraban ganas de abrazarme y decirme a mí misma que no me merecía lo que me estaban haciendo. Ahí fue cuando dije que esto estaba fatal, así que volví a engordar por el efecto rebote. Cogí muchos kilos a pesar de ir al gimnasio cinco veces a la semana, bailar dos y estar más en forma que en toda mi vida. Ahí tomé la decisión de no hacer una dieta nunca más".

¿Qué es la gordofobia?

La gordofobia tiene una base de odio y es una discriminación que sufren muchas personas cuyos cuerpos se salen de los estándares del canon de belleza que han sido, al fin y al cabo, creados por la sociedad y de forma excluyente. Como explica Mónica, hay dos formas distintas de esta discriminación: “Una cosa es la gordofobia que tienen las personas delgadas, que al final es un sesgo negativo que tienen hacia las personas gordas. Luego, está la gordofobia interiorizada de las personas gordas, que siguen pensando que son erróneas, deberían cambiar, se merecen todo lo que le pasa o no deberían comer”.

Piensas que es normal porque no eres merecedora del amor

Este odio parece haber inundado varias esferas de la vida privada y pública de muchas personas. En el mundo de la moda, según Mónica, existe un problema cuando “una persona gorda va a una tienda y no encuentra ropa de su talla porque lo que piensa es que no vale para nada y que no tiene hueco en esta sociedad”. Lo mismo ocurre cuando las medidas de los asientos del autobús no están hechas para todos los cuerpos o incluso en el amor, ya que, según ella: “A la hora de vincularte sexo-afectivamente, muchas veces se sufre de rechazo por parte de las parejas y piensas que es normal porque no eres merecedora del amor”.

Qué pasa con el ‘si comes, engordas; si comes poco, adelgazas’ y la medicina

Mónica González.
Mónica González.
Pamela Roca Ascat

Existe un pensamiento más que común e interiorizado en nuestra sociedad: la persona considerada gorda tiene esa condición por comer en exceso y la persona considerada delgada tiene esa condición por comer ‘bien’, es decir, por comer de forma ‘saludable’. En cuanto al ámbito sanitario, según Mónica González: “En el médico cualquier cosa que te pasa es por ser gorda”. Además, las consultas a personas consideradas gordas duran mucho menos tiempo y en ellas los sanitarios mantienen menos contacto visual con el paciente, según un estudio

Una persona puede tener salud en cualquier peso

Este estigma de las personas gordas se basa, según Mónica, en una regla reduccionista: “La ecuación come mucho, engorda; come poco, adelgaza no es verdad. Es reduccionista. Una persona puede tener salud en cualquier peso, lo que hay que hacer es poner el foco en los hábitos de vida saludables y con eso también me refiero a la salud mental y los factores de salud que son ambientales como la sociedad o la genética. Una persona que está recibiendo constantemente discriminación está todo el rato generando cortisol y esto está relacionado con el estrés, por lo que es la pescadilla que se muerde la cola”.

¿Hacer deporte para adelgazar o para estar bien?

Mónica González haciendo deporte
Mónica González haciendo deporte
Aportada por Mónica González

Uno de los denominadores comunes que aparece presente en la mayoría de argumentos y manifiestos en contra de la gordofobia es el relacionado con el mundo del ejercicio y el deporte. Para Mónica: “En el mundo del deporte hay mucha discriminación. Empezando por el mundo de la ropa, si yo quiero hacer surf lo más probable es que no encuentre un neopreno de mi talla. Segundo, cuando ves un anuncio de deportes ves cuerpos delgados y ya relacionas este cuerpo a este ámbito cuando eso no es real porque hay personas gordas que hacen un montón de deporte”.

¿Qué contradicción y peligro hay en todo esto para las mujeres que sufren la gordofobia? Mónica piensa que estos mensajes del ámbito deportivo son peligrosos para muchas personas gordas y/o con problemas de alimentación, ya que “pueden tener trauma con el deporte porque han sufrido gordofobia en algún momento de su vida y se lo toman como un castigo. A las gordas de pequeñas se nos dice que no podemos hacer deporte, nos lo tomamos como un castigo y cada vez hacemos menos ejercicio, aunque nos mandan el mensaje de que las personas gordas tenemos que hacer deporte”.

Hay que hacerlo para estar bien, no para estar delgada

El lenguaje puede llegar a ser muy importante y esconder muchos dobles significados. Muchas veces el mensaje que se manda tiene como fin el adelgazamiento y acabar consiguiendo como resultado un cuerpo determinado, hecho que para Mónica es un error: “De lo que se trata es que la gente tenga bienestar y haga el deporte que disfrute y más le guste. Hay que hacerlo para estar bien, no para estar delgada”.

Acabar con la gordofobia y empezar a quererse a una misma

Mónica González mirándose al espejo.
Mónica González mirándose al espejo.
Aportada por Mónica González

Vivir todas estas situaciones y mensajes llenos de odio, ya sean intencionados o no, puede resultar muy difícil para muchas mujeres, pero, ¿cuándo cambia todo esto? Para Mónica, “Lo primero es darte cuenta de lo que está pasando, de que te ves en el espejo, pero no te miras de verdad. Lo que hago en mis talleres es ayudar a que la gente deje de percibir el cuerpo a partir de la mirada y empiece a vivirlo como una experiencia porque muchas veces sentimos el cuerpo solo a través de los ojos, pero rara vez sentimos el cuerpo internamente y estamos conectadas a él de verdad".

Lo primero es darte cuenta de lo que está pasando, de que te ves en el espejo, pero no te miras de verdad

El consejo de la coach para empezar a valorar todas las cosas de la que tu cuerpo es capaz de hacer es generar otra mirada hacia nuestro interior y no tener con nosotras las exigencias que no tenemos con las demás, ya que “si tu novia, hija, madre, hermana o mejor amiga engorda 15 kilos no la vas a dejar de querer, entonces, ¿por qué contigo sí? Pues porque no estás poniendo el foco en lo importante o estás valorando cosas que no te dan felicidad.

¿Qué papel tiene el humor en la aceptación de una misma? Para Mónica la respuesta es sencilla: “Lo de las bromas es como cuando tú puedes decir que tu familiar es un pesado, pero cuando lo dice otro te molesta. El humor es algo maravilloso para sostener el dolor y relativizar, pero cuando lo haces de forma permanente para no entrar en contacto con el dolor es contraproducente. Cuando estás constantemente riéndote de que te discriminen, al final evades el dolor que te produce esa discriminación. En general las gordas tenemos más sentido del humor, lo hemos desarrollado para sobrevivir”.

¿Quieres recibir gratis todos los jueves en tu correo los mejores contenidos de belleza, moda y estilo de vida? Apúntate a nuestra Newsletter.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento