Cuando llegan las altas temperaturas y pensamos en los outfits para disfrutar de un día de playa o piscina, las preocupaciones por perder peso aparecen. Sin embargo, como el verano ya ha empezado, no contamos con demasiado margen. Por eso, puede que caigamos en algunos errores, muy comunes, que es importante revisar.
Comer mucho menos
"Comer menos nunca es la solución", así de contundente es Nerea Roussel, dietista y nutricionista del Servicio de Nutrición de Policlínica Gipuzkoa y del Hospital de Día Quirónsalud Donostia. Y es que esto solamente acaba dejándonos con hambre y provocando que, de manera inevitable, nos demos un atracón en un momento dado.
Además, como explica esta dietista y nutricionista, "al ser una dieta que no podemos mantener a largo plazo, porque nadie puede vivir así, volvemos a nuestros hábitos y cogemos todo el peso perdido o más". Pues, comer menos de lo que realmente nuestro cuerpo demanda es algo insostenible. Y, al final, no nos estamos haciendo ningún bien.
Elegir dietas milagro
Un experto en nutrición nunca recomendaría una dieta milagro y exprés. Por eso, uno de los mayores errores al perder peso no solo es decantarse por esta opción, sino buscarla por internet. Algunas muy famosas son las siguientes que exponemos en este breve listado:
- Dieta del limón: comer abundantes frutas y verduras, y beber hasta 8 vasos de zumo de limón a lo largo de todo el día.
- Dieta líquida: consiste en ingerir solamente líquidos (zumos, caldos, sopas, infusiones, etc.) durante unos días o 1 semana.
- Dieta del pomelo: se trata de incluir el pomelo en todas las comidas, desde el desayuno, comida, merienda y cena.
- Dieta Dukan: se incrementa el consumo de proteínas, mientras se reducen los carbohidratos.
¿Qué tienen en común todas estas dietas? Que, como informa Ana Alejandra Cordero Vaquero, endocrinóloga del Hospital Quirónsalud Cáceres, "las "dietas milagro" suelen ser muy desequilibradas nutricionalmente, pueden dañar nuestra salud y no son efectivas ni se pueden mantener a largo plazo".
Perder peso demasiado rápido
Otro de los errores comunes al intentar perder peso es que este proceso sea rápido. Esto se consigue con dietas milagro que desequilibran nuestras comidas, pero también comiendo menos. Y es que como no planificamos esto con tiempo, el verano acaba echándosenos encima. Ahora bien, esto tiene una consecuencia: el efecto rebote.
La pérdida de peso acelerada no solo es perjudicial para nuestra salud, sino que, como explica el doctor Daniel Cabo Navarro, especialista del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Quirónsalud Málaga, con el efecto rebote "se gana más peso del perdido. Esto se debe a que con estas dietas lo que se pierde es el agua corporal y la masa muscular, que efectivamente restan kilogramos". Una consecuencia negativa.
No hacer ejercicio físico
Finalmente, en el momento en el que nos ponemos a dieta por nuestra cuenta nos olvidamos de lo fundamental: hacer ejercicio físico. Pues este "contribuirá a quemar calorías y como consecuencia a perder peso poco a poco, manteniendo la masa muscular", como indica Felipe del Valle, especialista en nutrición humana del Centro de Excelencia en el Tratamiento de la Obesidad del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón.
De esta manera, sí será posible tener un mayor éxito en la pérdida de peso, ya que no pasaremos hambre, podremos comer de todo e incluiremos un hábito en nuestras vidas muy positivo, como es el deporte. Solamente así, lograremos evitar fracasar durante este proceso.
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