Guadarrama es uno de los 96 hospitales de media estancia públicos de nuestro país, además de uno de los más prestigiosos. Ubicado a los pies del parque natural de la Sierra madrileña, a algo menos de 50 kilómetros de la capital, en sus comienzos fue un hospital destinado a tratar pacientes con tuberculosis, pero hoy es todo un referente en rehabilitación con 144 plazas.
Como explica Rosa Salazar, gerente del hospital, el paciente más habitual de este tipo de hospitales es el de pacientes de ortogeriatría tras una operación, pero puesto que la finalidad de estos hospitales es que los pacientes recuperen lo más posible una capacidad funcional perdida, también hay pacientes que "han sufrido un daño cerebral por ictus, con deterioros funcionales a causa de una enfermedad, con una amputaciones, traumatismos, pacientes que necesitan rehabilitarse tras largas estancias en UCI…".
Sergio García CarrascoPara acceder a un hospital de media estancia, los pacientes tienen que ser derivados desde el hospital de agudos en el que le han tratado la enfermedad. Desde este hospital remiten los informes de los pacientes al hospital y, cuando hay una plaza libre, se ingresa al paciente en el hospital de media estancia.
Sergio García CarrascoRosa Salazar explica que en Guadarrama, así como en otros hospitales de media estancia, los pacientes sólo están el tiempo necesario, pues toda hospitalización conlleva riesgos, tanto físicos como emocionales, "siempre que pueda hacerse en régimen ambulatorio debe hacerse, y el paciente tiene que estar con nosotros solo el tiempo que tenga sentido, mientras los beneficios superen los riesgos, ni un día más", recalca.
Sergio García CarrascoPrecisamente para que los pacientes estén el menor tiempo posible, la rehabilitación es intensiva, de unas tres horas diarias. Para que sea así, nada más entrar por la puerta, un equipo multidisciplinar (formado por médicos rehabilitadores, fisios, logopedas, enfermeras, etc.) diseña un plan a su medida, un plan que se materializa en la Unidad de Recuperación Funcional.
Sergio García CarrascoEn Guadarrama combinan la rehabilitación tradicional con fisioterapia, máquinas para trabajar la movilidad y la fuerza (cintas de correr, pesas...), con la más alta tecnología en robótica, que acelera la recuperación de los pacientes, como nos contó María Caballero Nahum, Supervisora de la Unidad de Rehabilitación, apoyada en la imagen en el robot Lexo.
Sergio García CarrascoLa neurorehabilitación se acelera gracias a máquinas como NeuronUp, que "permite el trabajo mediante juegos también, como ir colocando las monedas de más grande a más pequeña. Con ella puedes trabajar memoria, atención, cálculo… todos los aspectos neuropsicológicos, como lenguaje, que pueden estar afectados en el daño cerebral", explica María.
CEDIDA
También disponen de Desintey, un sistema basado en las neuronas en espejo, "cuando tú ves a alguien realizando un movimiento, especialmente si está muy cerca, las áreas cerebrales que realizan ese movimiento se activan, y también si tú te imaginas haciendo el movimiento". En pacientes que, por ejemplo, no pueden mover un brazo, el objetivo es estimular la parte del cerebro responsable de ese movimiento, "grabamos al paciente realizando el movimiento con el que sí puede mover y la máquina lo reproduce como si fuera la que no puede mover para que su cerebro crea que sí la mueve y si active la zona responsable de moverlo", explica.
Después de estimular el cerebro, pasan a otro dispositivo, el Armeo, un exoesqueleto, "primero estimulamos la corteza cerebral, y luego, el movimiento con este dispositivo, que trabaja los movimientos del brazo a través de juegos, que hacen que preste más atención y que mejore la plasticidad cerebral".
Sergio García CarrascoLa terapia ocupacional es parte indispensable de la rehabilitación, pues con ella trabajan cómo realizar las tareas cotidianas una vez vuelvan a casa, por eso en la sala de terapia ocupacional encontramos escaleras, pomos de puertas, cubiertos... y un largo etcétera.
Sergio García CarrascoLa logopedia es otra parte indispensable de la rehabilitación, sobre todo de pacientes con daño cerebral. En esta disciplina se trabaja que puedan volver a hablar lo mejor posible y que coman con seguridad.
Sergio García CarrascoEl equipo de enfermería -enfermeras y auxiliares- son indispensables para el tratamiento y el bienestar de paciente, pues son las personas que más tiempo pasan con ellos. Entre sus labores, como explica Laura, la responsable de enfermería, "nos coordinamos con el gimnasio para tenerlos preparados a esa hora para acudir a rehabilitación y, ya en planta, fomentamos que, todo lo que puedan, intenten hacerlo solos". Además, curan heridas, ayudan a comer, están atentos a su salud, etc.
No todos los pacientes van a recuperar del todo la autonomía, por eso en Guadarrama cuenta con una escuela de cuidadores, de la que se encargan en enfermería y que consiste en formar a los familiares del paciente en su cuidado una vez lleguen a casa, "cuidar es duro, por eso tenemos que ayudarles", comenta la gerente.
Sergio García CarrascoLa terapia y los cuidados que ofrece el personal del hospital son indispensables para que la paciente progrese, pero no lo es menos su estado emocional. Para que estén lo mejor posible, además de las visitas de sus familiares, existen programas de voluntariado con personas que los visitan, pueden visitarlos sus mascotas y disponen de exteriores como el de la foto, orientadas que el paciente pasee en un ambiente tranquilo, a la vez que trabaja lo aprendido en la rehabilitación.
Sergio García CarrascoEl equipo que atiende a cada persona, se reúne regularmente para coordinarse, ver cómo está el paciente, revisar objetivos y trabajar la salida, "el médico rehabilitador decide cómo será la rehabilitación una vez terminada su estancia en Guadarrama, pues lo ideal es que, una vez que nosotros terminemos, haya una continuidad en la rehabilitación, sobre todo si tiene potencial, porque la rehabilitación es un proceso muy largo, de dos años incluso", explica María. El equipo al completo, especialmente los trabajadores sociales, son los encargados de buscar los recursos que necesitará una vez se le dé el alta.
Sergio García CarrascoLos hospitales de media estancia son, como explica Rosa Salazar, cada vez más necesarios, "con el aumento de la esperanza de vida, hay más enfermedades crónicas que producen discapacidad o una pérdida de capacidad funcional, la necesidad de este tipo de hospitales es mayor, y pasar por ellos es clave para determinar cómo se va a desarrollar el paciente en su entorno. En la medida en la que seamos capaces, tenemos que mantener al paciente con el mayor nivel de autonomía, con todo lo que conlleva para la sociedad y para el bienestar del paciente" concluye.
Sergio García CarrascoComo reconoce Rosa Salazar, estar hospitalizado siempre es duro, pero, teniendo en cuenta algunos pequeños detalles y, sobre todo, poniendo al paciente y su bienestar en el centro, se puede conseguir que se lleve bonitos recuerdos. Para conseguirlo, en Guadarrama cuidan mucho la salud emocional de los pacientes, "el cuidado emocional juega un papel clave en la motivación y en la rehabilitación, por eso queremos que se sienta seguro y acompañado, que tome sus propias decisiones y tenga la tranquilidad de que en el hospital vamos a hacer todo lo posible por él".