La bondad de los más pequeños no conoce límites, y si no que se lo digan a Lisandro, un joven con problemas de movilidad que solo conoce compresión y apoyo de sus compañeros de clase.

"¡Patea! ¡Patea! ¡Patea!", le dicen estos alumnos del colegio Sagrado Corazón de Argentina a su compañero mientras este camina hacia la pelota con su andador.

Tal y como se ve en el vídeo, el resto esperan pacientemente a su alrededor, algunos incluso apartando a otros compañeros para que no se metan en la trayectoria de la pelota.

Entonces, Lisandro golpea y consigue marcarle al portero y todos empiezan a gritar, saltar y abrazarle de alegría. "¡Gol!", empiezan a gritar eufóricos los alumnos.

"No hay mejor actitud que la que nace del corazón", tuiteó Lucas Monza, periodista deportivo que compartió el vídeo en redes. "¡Goles que alegran el corazón!", alabó un dibujante argentino que suele hacer viñetas de fútbol.