El concepto más básico de una carta postal es la dirección del destinatario. Pero a veces ni siquiera ésta es necesaria. Y si no que se lo digan al músico norirlandés Feargal Lynn, que recibió una misiva en cuyo sobre no venía su dirección, sino una descripción de él mismo.

Tal y como recoge el Mirror, Lynn compartió una foto de la carta en Twitter, donde aprovechó para felicitar a los funcionarios del Royal Mail, el servicio británico de correos.

"Tenían un nombre, el pueblo donde crecí y la mitad del código postal ... ¡el resto se parece más a la historia de mi vida!", escribió Lynn.

La descripción de la carta era la siguiente: "Feargal, que vive al otro lado de la calle del Spar, su madre y su padre eran los dueños, su madre era Mary y su padre Joseph, se mudó a Waterfoot después de casarse, toca la guitarra y dirigía discotecas en el salón parroquial y el hotel en los años 80. Sus amigos tipo también dirigen la carnicería en Waterfoot". Esta información le bastó al cartero para hacer llegar la carta a su destino. 

"Decidí el año pasado escribir cartas manuscritas después de que una amiga cantante y compositora, Hannah Scott, escribiera una canción llamada The Letter sobre cómo mantener vivo el arte de escribir cartas", dijo Lynn.

"Le escribí a una amiga en Navidad a quien conocía de toda mi vida por las vacaciones de verano y no puse mi dirección en la carta; esta fue su respuesta. Fue como ver mi vida en un sobre", dijo el músico.