El tenista chileno Mauricio Álvarez-Guzmán ha sido sancionado de por vida tras ser declarado culpable de amañar de partidos y cometer delitos de corrupción que violan el Programa de Lucha contra la Corrupción de Tenis (TACP).

La Unidad de Integridad en el Tenis (TIU) descubrió que el jugador de 31 años trató de apañar el resultado de un partido correspondiente al ATP Challenger Meerbusch 2016, donde “ofreció 1.000 euros a un jugador por perder un set”, indicó el organismo en un comunicado.

El sudamericano también ha sido declarado culpable de comprar una invitación del ITF F27 Futures jugado en julio de 2016 en Antalya, Turquía, donde también intentó comprar una invitación para el cuadro de dobles.

El caso de Alvarez-Guzman fue juzgado por el responsable de anticorrupción, Charles Hollander, en una Audiencia celebrada esta semana en Londres.

Tras ser declarado culpable, el chileno queda inhabilitado de por vida para participar en cualquier competición "o asistir a cualquier torneo o evento organizado por los órganos rectores del tenis", recuerda el comunicado.

Álvarez-Guzmán no pasó del puesto 1050 de la clasificación mundial, mientras que su mejor ranking en dobles fue el 672 llegó en agosto de 2014. Su puesto actual en el circuito mundial de la ITF es el 3059.

La TIU es una iniciativa de la Junta de Grand Slam, la Federación Internacional de Tenis, la ATP y la WTA, quienes afirman estar “comprometidos conjuntamente con un enfoque de tolerancia cero ante la corrupción en el tenis”.