Bjarne Riis, director del equipo CSC, no acudirá a la próxima edición del Tour de Francia, que comienza este sábado en Londres. Tampoco estará el italiano Gianluigi Stanga, director del equipo Mirlam y otro de los señalados por Jörg Jaksche en una entrevista.

"Debo reconocer que no me siento con fuerzas para afrontar un largo y agitado Tour de Francia. Por eso no estaré presente en el Tour", señaló el danés. "No quiero ser una influencia negativa para mi equipo", añadió.

La decisión de Riis era previsible después de que anunciase hace unas semanas , el pasado 25 de mayo, que consumió eritropoietina (EPO) durante su carrera como ciclista profesional.

La organización del Tour, tras conocer las declaraciones del que fuera ganador del Tour de Francia en 1996, manifestó su intención de impedir la presencia de Riis en su carrera. La imposibilidad de prohibírselo, sin embargo, supuso una protesta formal. "No será bienvenido", dijeron entonces integrantes del staff del Tour.

Además, el Tour adelantó que en su guía oficial, la cual edita anualmente antes de cada edición, figuraría el nombre de Riis con una explicación sobre su victoria, que logró con trampas.

"No ha habido un momento de paz con la prensa desde que hablé", reconoció Riis. Su equipo es una de las formaciones más potentes de este Tour.

El español Carlos Sastre parte entre los favoritos y se espera con curiosidad qué pueden dar de sí el suizo Fabian Cancellara o el luxemburgués Frank Schlek, cuyo hermano pequeño, Andy, sorprendió con su reciente podio en el Giro.

Malestar con Jaksche

Las recientes declaraciones del alemán Jörg Jaksche provocaron la indignación de Riis. Jaksche, ex corredor del CSC y también del Liberty Seguros de Manolo Saiz, reconocía en una extensa entrevista en Der Spiegel que vivió el dopaje sistemático en todos los equipos donde corrió.

"Rechazo rotundamente las acusaciones hechas en la entrevista con Jaksche. No he tenido conocimiento, ni he animado a los corredores del CSC a usar sustancias ilegales", defendió el director danés.

"Mi conciencia está limpia, pero si Jörg Jaksche tiene otra visión sobre el asunto necesita presentar documentación para probar sus acusaciones", advirtió el ganador del Tour de 1997. "Me disgusta haberme convertido en blanco de las acusaciones tras mi confesión pública", añadió.

Bjarne Riis no quiso dejar escapar la ocasión para defender su nueva vida: "No deseo que mi equipo, que no tiene nada que ver con los errores de mi pasado, sea el centro de acusaciones falsas".