En medio de un ambiente enrarecido por las salidas nocturnas de Ronaldinho, sus extrañas lesiones y su posible traspaso al Chelsea, el Barcelona consiguió ayer que el Camp Nou volviera a mirar al césped. Los azulgrana trazaron un fútbol de cinco estrellas. También ayudó el Zaragoza, que parece haber perdido la alegría de antaño.
A la tristeza aragonesa, el Barça respondió con el descaro de Messi. El argentino le tiró una pared a Henry que el francés mortiguó para que pusiera el 1-0 con un disparo ajustado. Pese a la apatía, el Zaragoza obtuvo recompensa en la única jugada que trenzó con criterio: Zapater recibió de Aimar y batió a Valdés. Sin respiro, Messi puso el 2-1 tras un barullo. Con La Pulga haciendo las delicias del Camp Nou, que coreó el nombre de Ronadinho, Iniesta tomó el testigo. El manchego hizo el tercero en una perfecta jugada. Márquez, de cabeza, puso el cuarto. Con el Zaragoza roto, Iniesta se lució y Henry buscó su gol sin fortuna.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios