El danés Michael Rasmussen ha desvelado que llegó a plantearse la posibilidad de suicidarse en más de una ocasión después de que fuera apartado del Tour de Francia y de las mentiras sobre su paradero antes de la prueba francesa.

En una entrevista concedida al periódico holandés De Telegraaf y recogida en el diario El País, el danés confiesa que el mismo día que abandonó la prueba por decisión de su equipo no paró de llorar y vivió momentos duros.

"En el otro lado de la carretera estaban pasando los camiones frente a nosotros. Habría sido fácil girar el manillar y acabar con esa pesadilla. Después, ya en mi habitación, cinco horas después de haber estado en el podio estaba sólo y pensaba que mi mundo se había hundido. Afortunadamente, no tenía una cuerda en la habitación, sino no estaría aquí ahora", explicó.

Asimismo, el ciclista reconoció que mintió a la UCI acerca de su paradero antes del Tour cuando se saltó controles antidopaje diciendo que estaba en México, cuando realmente se encontraba en Francia y en Italia. Siempre alegó motivos privados para mentir, pero no quiso explicarlos.