El jugador de la NFL Kareem Hunt ha sido suspendido ocho partidos por un incidente ocurrido hace más de un año. El corredor es culpable de violar la política de conducta de la NFL, que le impone la sanción por “altercados físicos en su residencia en Cleveland el pasado febrero y en un hotel en Ohio en junio”.

La polémica comenzó en noviembre de 2018 por la filtración de un un vídeo sobre el incidente de Ohio que mostraba a Hunt fuera de sí agrediendo a una mujer. El jugador fue inmediatamente despedido por los Chiefs de Kansas City y hace solo unas semanas firmó por los Browns.

Hunt acepta el castigo y no apelará, según anunció en un comunicado en el que “quiero disculparme nuevamente por mis acciones del año pasado”.

El corredor reconoce que “sé que mi comportamiento duele a mucha gente y nuevamente me disculpo ante ellos. Respeto la decisión de la liga sobre disciplina y aprecio el tiempo que pasé con el comisionado Roger Goodell la semana pasada".

El caso ha afectado mucho a Hunt, que no ha publicado nada en sus redes sociales desde que saltara la polémica, volverá a ser elegible en el noveno partido de la temporada regular. Por todo lo ocurrido, asegura que continuará tratando de ganarse la confianza de la liga, sus compañeros, su organización y la comunidad "a través de mis acciones".