Los silencios en las competiciones domésticas, contenidos, se transforman en declaraciones cuando llegan las convocatorias internacionales. Y este miércoles, otro ejemplo. Karim Benzema, delantero del Real Madrid, lamentó desde Francia las críticas "injustas" por su supuesta pasividad sobre el terreno de juego, unas críticas que se unen a su falta de gol con la selección gala. "No es una cuestión de actitud. Se puede hablar de actitud cuando un jugador no quiere jugar al fútbol, pero yo sí quiero. Corro diez kilómetros cada partido. Es injusto porque sí corro", setenció.

"Es la sequía goleadora más larga de mi carrera, pero trabajo duro. No durará diez años. Tengo oportunidades y solo necesito aprovecharlas. No exijo ser titular, estoy en un equipo y no hay primera, segunda y tercera elección, el entrenador elige. Soy un profesional, si me alinean juego y su estoy en el banquillo apoyó al equipo", zanjó el galo, que con su selección acumula 1.217 minutos sin marcar.

Al atacante se le recordaron las palabras de Carlo Ancelotti tras el partido contra el Athletic de Bilbao. "Una cosa está muy clara. Benzema fue un poco pitado, mientras que Di María fue aplaudido por todo el estadio. Es un claro signo para todos de que el trabajo duro es aplaudido", dijo en aquel momento el técnico del Real Madrid. El italiano descartó tener que necesitar hablar con el jugador posteriormente porque no había ningún conflicto.

"¿Qué falta de actitud?", se preguntó Benzema, que dio su versión de lo ocurrido. "Ancelotti no dijo que yo trabajara poco. Dijo que Di María y yo no hacemos el mismo tipo de trabajo defensivo", opinó el galo, que recordó que es "un delantero". "Soy delantero, por tanto me corresponde a mí hacer el primer repliegue defensivo. Es importante para todo el equipo. Pero soy delantero, no debo hacer el trabajo de un lateral derecho o de un defensa central", precisó.