Siempre que le preguntaban a George Mallory, puro romanticismo montañero, por qué se obsesionaba con escalar el todavía por entonces indómito Monte Everest, el británico decía lo mismo: "Porque está ahí". Su empeño, eso sí, acabó costándole la vida en 1924.

No estamos en el primer tercio del siglo xx, ni el final será igual, pero la respuesta podría aplicarse para explicar la nueva aventura que afronta Iván Raña: el triatleta gallego, primer campeón del mundo español en este deporte, reciente subcampeón nacional a sus 33 años, que da el salto al Ironman el 24 de noviembre en la caribeña isla de Cozumel (México), muy cerca de Cancún, donde diez años atrás logró aquel mundial.

De primeras, el cambio achanta por las distancias. En la olímpica, su especialidad, se disputan 1,5 kilómetros nadando, 40 de bicicleta y 10 en carrera a pie. El Ironman revoluciona las distancias: 3,8 en el agua, 180 de pedaleo y, de postre, los 42,195 km del maratón.

"Le tengo respeto a esta distancia por las horas y la acumulación de esfuerzos –explica en conversación telefónica con 20 minutos–. A partir de las cinco o seis horas me enfrentaré a nuevos obstáculos... Tengo el coco con callos, no en vano son 20 años de triatlón al más alto nivel, pero me falta esa experiencia específica para el Ironman. Tengo la base para dar el salto. Pero también sé que el muro está ahí".

Respeto, sí. Miedo, no. Raña, deportista inquieto, espíritu libre, conoce en primera persona qué supone competir en la distancia Medio Ironman. El gallego, con apenas 20 años, acabó segundo en el Triatlón de Zarautz: "Fue bien, sí, pero el volumen de trabajo no era el mismo que ahora. Ni tan siquiera era específico".

Apasionado del ciclismo, no dudó  en dar en salto al pelotón durante 2009 de la mano del desaparecido Xacobeo. Amante de los coches, también ha competido junto a su hermano José Manuel en algunos rallies de ámbito autonómico.  Pero el Ironman es diferente. "El objetivo es acabar, porque tengo la obligación de acudir a uno y sumar puntos para seguir en 2013. Tengo ganas", concluye.

Antes, Iván Raña disputará la última cita de las Series Mundiales, en Nueva Zelanda (22 de octubre), donde también acudirá Javier Gómez Noya. El subcampeón olímpico expandirá sus experiencias tomando parte, una semana después, en el Mundial XTerra de Maui, una exigente prueba combinada en el medio natural: 1,5 km de natación, 30 de mountain bike y 9,8 de trail. Raña fue quinto en esa cita en 2011.