El sueco Zlatan Ibrahimovic ha desvelado que en los últimos seis meses sólo ha hablado en dos ocasiones con el técnico del Barcelona, Josep Guardiola, con el que ha reconocido que, efectivamente, existe un problema.

No obstante, el jugador ha señalado que desconoce qué sucede, a la vez que ha asegurado que los dirigentes del Barcelona le garantizan que no lo quieren vender.

Zlatan ha aparecido tras el partido contra el Milan en la zona mixta del Camp Nou, después de haber jugado media parte, y a diferencia del silencio que ha guardado con los medios españoles, ha establecido una corta conversación con los enviados italianos al partido.

"No sé por qué no me quiere", ha señalado el jugador refiriéndose a la hipotética mala relación que tiene con el técnico, aunque él apunta que no sólo no la ha generado sino que desconoce de qué se trata.

Dijo que es un "elogio" que el Milan lo desee, pero se refirió a que él se encuentra bien en Barcelona "y también mi familia".

"Yo ahora soy jugador del Barcelona", ratificó, después de que esta tarde dirigentes del Barça y del Milan hayan tratado el traspaso o cesión del jugador a la entidad italiana.

El jugador insistió en que desconoce qué ha pasado con Guardiola: "No me habla. No sé qué problema tengo. Sólo me ha hablado dos veces en los últimos seis meses. Yo estoy bien aquí y no soy un problema. Además, cuando hablo con los dirigentes, no me quieren vender".

También dijo que no tiene ningún problema con Messi, zanjando la corta conversación que mantuvo con los informadores en la zona mixta del Camp Nou.

Guardila le contesta

El entrenador del Barcelona, por su parte, ha respondido a estas declaraciones de Zlatan Ibrahimovic asegurando que su puerta "siempre está abierta" en el vestuario y que hay una razón que no quiere desvelar de momento que explica el por qué del problema comunicativo.

"Tengo la puerta abierta, siempre está abierta en el vestuario. Si no se hace, siempre hay una razón", espetó. Además, apuntó que además de un jugador siempre hay una persona, por lo que parece que los problemas con el sueco serían debidos a su personalidad. "Siempre hay jugador y persona, y la persona va delante. Fue un ejemplo de profesionalidad en el trabajo, pero hay persona. Y siempre va delante", reiteró.

No obstante, aseguró que hablará con él "una tercera vez" para intentar solucionar el conflicto. "Siempre hay una razón para las cosas. Soy súper comunicativo y hablé con él 45 minutos, si dice que solo he hablado con él dos veces, siempre hay una razón. Y no lo explicaré por el bien de la institución, no toca. En su momento daré mi opinión sobre el porqué", aseveró.

Tensando la cuerda

Mientras tanto, y por si la situación no fuese lo suficientemente compleja, el representante de Ibrahimovic, Mino Raiola, se descolgaba con unas declaraciones en las que aseguraba que Guardiola no es tan perfecto como la gente cree y asegurando que el técnico tiene problemas consigo mismo.

Además apuntó que si Zlatan saliese del Barcelona sería de manera irreversible, aludiendo a una posible cesión que se viene colocando sobre la mesa en las últimas horas.