Cada vez son más los deportistas de élite que compaginan su trayectoria con los estudios universitarios. La tendencia cambió hace años y en cualquier modalidad podemos encontrar futuros doctores, ingenieros, biólogos, maestros o fisioterapeutas.
No siempre es fácil conciliar los entrenamientos y las competiciones con los libros. El deporte de élite exige una preparación de máximo nivel, con las consiguientes sesiones de entrenamiento y fisio, concentraciones con el equipo nacional, viajes a competiciones…
La dificultad aumenta cuando los deportistas no encuentran la complicidad de sus profesores. Se han conocido casos de atletas con problemas para progresar en los estudios por incompatibilidades de calendario y las reservas de algunos educadores a adaptarse.
Este es el caso del joven medio fondista Adrián Ben. Estudia un grado en Fisioterapia y ha criticado la respuesta de uno de sus profesores tras preguntarle cómo podía recuperar dos prácticas obligatorias a las que no podía asistir: “Esto es la Univerisidad, hay que elegir una cosa o la otra”.
Ben ha estranado a lo grande la temporada en pista cubierta. El gallego conquistó el oro en los 1.500 del Campeonato Unión Mediterráneo sub-23, tras superar en el esprint a Hicham Akankam, el aspirante marroquí que partía como favorito. No obstante, la promesa de los 1.500 metros afirma que “hay unos derechos para los Deportistas de Alto Nivel que te venden antes de matricularte que (el profesor) ni siquiera ha contemplado y simplemente dice “así es la vida””. También admite que “es triste y un poco frustrante que las personas que deberían ayudarte pongan piedras en el camino”.
Hoy he hablado con mi profesor de la uni (UCM) para avisarle que, debido a mi preparacion y mis competiciones, me sería imposible asistir a dos practicas obligatorias; si habría alguna de recuperarlas
— Adrián Ben (@adryben44) 30 de enero de 2019
Su respuesta ha sido:
Esto es la universidad, hay que elegir una cosa o la otra
Deportistas 24/7
Varios día antes de la crítica de Ben, otro de los jóvenes talentos del atletismo español reclamaba respeto para los DAN: “Un atleta lo es las 24 horas del día, no solo las 2 horas que sale a competir”, afirmó el velocista Aleix Porras, de 19 años.
El atleta catalán publicó un vídeo “sobre las cosas buenas y malas del atletismo” en el que destaca el conocer gente, viajar y competir como algo “espectacular”, ya que “luchar por tus objetivos y conseguirlos es de las mejores sensaciones que puedes tener en la vida”.
Somos atletas las 24h del día pic.twitter.com/amTe42IQo2
— Aleix Porras (@PorrasAleix99) 28 de enero de 2019
No obstante, en el apartado negativo subraya que “el atletismo es un trabajo muy dedicado. Toodo lo que haces en tu día a día puede influir en tus resultados: si duermes bien, si comes bien, si sales de fiesta, si vas a la nieve y te lesionas, si vas en moto y no tienes cuidado, si tus amigos se van de viaje y tu tienes que entrenar… Ser atleta las 24 horas es importante para que salgan los resultados”
Ejemplo de oro... olímpico
El campeón olímpico en taekwondo Joel González vivió una situación similar a la de Adrián Ben, mientras cursaba la licenciatura en criminología: “No puedes dar todo el tiempo necesario, a veces no puedes asistir a clase y ves que no llegas. El simple aplazamiento de un examen o poder presentar un trabajo una semana más tarde es primordial para un deportista”, reconocía en un acto celebrado en la sede del COE.
Una persona preparada física y mentalmente es una persona que multiplica sus oportunidades de éxito en cualquier ámbito 👨🏻🎓🥋😎 #valores #deporte #universidad #ucam #coe #csd pic.twitter.com/HeGuVHqGEi
— Joel Gonzalez Bonilla (@joelgonzaleztkd) 3 de septiembre de 2018
El doble medallista olímpico finalizó la carrera en la Universidad Autónoma de Barcelona a pesar de que “hay profesores que no se enteran de lo que significa ser Deportista de Alto Nivel y lo complicado que es adaptar esta vida a los estudios”. No obstante, su visión cambió cuando completó su formación con un Master en la UCAM, donde “tenía las facilidades para estudiar y poder preparar y competir unos Juegos Olímpicos y un Campeonato del Mundo”. El cambio de perspectiva le ha llevado incluso a iniciar un doctorado que combina sus dos pasiones: criminología y deporte.
Como muchos deportistas Joel tiene claro que la vida deportiva es muy corta y se pregunta “¿Qué nos queda después? Con más de 30 años y sin experiencia laboral… ¿y sabiendo hacer qué? Yo pego patadas, ¿a dónde voy a ir pegando patadas?”.
Ahí reside la importancia de llegar preparado a la otra carrera, la profesional: “A día de hoy en España todo el mundo tiene títulos, todo el mundo está bien preparado y bien formado, y los deportistas tenemos que aportar algo más. Podemos aportar que somos competitivos, que sabemos trabajar en equipo... pero eso tiene que estar apoyado en algo”.
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