El italiano Fabio Cannavaro, expulsado en el partido contra el Espanyol (0-1) por doble tarjeta amarilla, aseguró que en la jugada que le acarreó la segunda cartulina en el minuto 53, no hubo mano, sino que el balón le dio en la cara.

"No me gusta la expulsión. Es difícil aceptarlo. Tenía la cara roja y el ojo también. No me dio en la mano. Afortunadamente ganamos el partido porque necesitábamos los puntos después de perder el último partido", declaró Cannavaro en la web oficial del Real Madrid.

Una victoria para seguir siendo optimista

"El Espanyol es un buen equipo que no perdía aquí desde hace mucho tiempo. Si ganamos todos los partidos somos campeones seguro. Sólo pensamos en los nuestros y en nadie más. Espero jugar el miércoles si se recurre la tarjeta".

Respecto al premio FIFA a Mejor Jugador del Mundo, aseguró que irá "a la gala a Ginebra, pero no sé si se ganado. El Balón de Oro ya lo sabía días antes, pero esta vez no. Si se confirma sería increíble. Un año espectacular: ganando el Mundial, la Liga de Italia, he venido al Real Madrid..."

Capello: "El club recurrirá la segunda amarilla"

"Estoy muy satisfecho porque hemos jugado muy buen partido y me gustó todo de mi equipo. Tuvimos mucha tranquilidad, dominamos con calidad y ganamos meritoriamente", aseguró el técnico italiano.

El técnico lamentó "la injusta expulsión" de Cannavaro y avisó que el club recurrirá la segunda tarjeta amarilla pues explicó que el jugador tocó el balón con la cara, y no con la mano, como apreció el árbitro Pérez Lasa.

También felicitó a su pupilo, al que muchos señalan como el premiado del galardón de Mejor Jugador del Mundo por la FIFA. "No es tan difícil entender que reciba estos premios porque el Mundial es el Mundial y allí fue el mejor jugador del mundo. Que se coman las palabras que han dicho", subrayó.