Sloane Stephens y Anastasia Pavlyuchenkova protagonizaron esta semana en el Abierto de Pekín una discusión que ha dado mucho que hablar en redes sociales. Con un set para cada una, el partido se decantaba del lado de la estadounidense, cuando una disputa provocó que la juez tuviera que bajarse de la silla.

Cuando en el segundo set la tenista rusa acudió a su fisio por algunas molestias, Stephens lo tomó como una estrategia para cortar su buena racha. Por esta sospecha, ambas se enzarzaron y se acusaron mutuamente de ser irrespetuosas.

Una vez reanudado el juego y tras ganar un punto al despachar una bola que Pvlyuchenkova le tiró al cuerpo, Stephens se desahogó: "Esta puta zorra ha tirado a darme". Una disputa que no se corresponde con el habitual respeto que se respira en el mundo del tenis.