El parón por el All Star ha comenzado oficialmente tras el partido que ha enfrentado, en la madrugada de este jueves, a Chicago Bulls y Cleveland Cavaliers. El partido se cerró con la victoria de Chicago sobre Cleveland 113-98 en la que volvió a ser clave Pau Gasol, que a falta de algo más de un minuto consiguió el rebote que necesitaba para el doble-doble. Ahora, tras el parón, podrá superar la marca de Michael Jordan de 15 dobles dobles consecutivos con la camiseta de los Bulls.

Antes de empezar el partido, parecía ya sentenciado, los Cavaliers, que venían con una racha de nueve de sus últimos 10 partidos ganados, se plantaron en el United Center de Chicago con una sensación de entre falta de oxígeno y ganas que contrastaba con la pasión de un público y un equipo enganchado a una buena racha de cuatro partidos ganados con el de esta madrugada.

Los Cavaliers, echaron mucho en falta la presencia de un Kevin Love que en los últimos partidos había sido el equilibrio perfecto entre el individualismo de Lebron James y el juego del resto del equipo, con esta baja no hubo quien se impusiera a Pau, Noah y Gibson en la zona por mucho que lo intentara Mozgov y los lanzamientos continuos de James con un porcentaje de 12 de 26 no ayudaban mucho a su equipo.

A pesar de sus fallos, Lebron fue de lo mejor de su equipo con 31 puntos, acompañado por Irving con 17, aunque el base estuvo mal en defensa al no poder frenar la potencia de Rose, y Mozgov que aunque tuvo el papelón de pegarse con los tres pivots de los Bulls consiguió sacar del combate 13 puntos y 8 rebotes para su equipo.

Los Bulls, por su parte, vivieron un gran partido, mostrando que la confianza en el juego y la solidaridad defensiva ha calado en un equipo que necesitaba algo de regularidad como el comer. Butler volvió a ser baja, algo que antes habría sido determinante ahora se suple en los Bulls con las aportaciones colectivas y la buena actuación del suplente Tony Snell que con 22 puntos y un 81 por ciento de acierto hace olvidar a cualquiera.

Pero los líderes del equipo volvieron a ser dos, Pau Gasol en la zona y Derrick Rose en todas partes. Rose es el termómetro de unos Bulls que en el United Center ya empiezan a volver a escuchar el MVP para su jugador franquicia, y él lo devolvió con 30 puntos y siete asistencias.

Pau fue el jefe de la zona secundado por sus dos mosqueteros Noah y Gibson. Al de Sant Boi le costó conseguir su décimo rebote en los 31 minutos que jugó, no tanto los puntos que los consiguió en el primer cuarto. Pero la cosa es que lo consiguió, a dos minutos del final, y con ese 18 10 se queda a un solo partido, a un solo doble-doble de la marca de uno de los más grandes del baloncesto, en la franquicia donde lo fue todo. Michael Jordan está a un partido de perder uno de los tantos récords que tiene el eterno 23 de Chicago.

Ahora todos miran a Nueva York donde este fin de semana es la fiesta de la NBA, el All Star Game donde se vivirán momentos históricos como el enfrentamiento entre los hermanos Gasol.