La descalificación y posterior retirada de la medalla de oro de los 3.000 obstáculos al controvertido mediofondista Mahiedine Mekhissi-Benabbad sigue coleando este viernes.

A la polémica por lo sucedido —el atleta francés se quitó la camiseta cuando aún no había terminado la prueba, que encabezaba y que a la postre ganaría—, se unió poco después el acoso de miembros de la delegación francesa a varios de los corredores españoles, entre ellos Ángel Mullera, que dijo que si finalmente le daban el bronce (había quedado en princpio cuarto), lo aceptaría.

Así, este viernes, durante la ceremonia de entrega de medallas de dicha prueba, el nuevo ganador, el también francés Yoann Kowal, se ha bajado del primer sitio del podio al segundo (donde estaba el corredor polaco Krystjan Zalewski, que quedó segundo) después de que el español ha recibido su presea de bronce, evitando así la protocolaria celebración con los tres medallistas. Posteriormente, en rueda de prensa, Kowal ha pedido perdón por el gesto hacia el corredor.

Los incidentes de este jueves se produjeron en la zona mixta del estadio Letzigrund, sobre las 23.30 horas, cuando los atletas españoles (entre ellos Mullera) esperaban para pasar el control de dopaje y atendían a algunos periodistas españoles. Entonces, un miembro de la delegación francesa llegó a escupir a uno de los atletas. Los franceses recriminaban a los españoles que hubieran reclamado la descalificación de Mekhissi y les acusaban de falta de dignidad.