El fichaje de Lewis Hamilton por Ferrari para la temporada 2025 ha desatado un seísmo de proporciones nunca antes vistas en la Fórmula 1. Tendrá múltiples consecuencias para todos los implicados y afectados, prácticamente la parrilla entera, pero sobre todo permitirá asistir quizá al único reto que el piloto inglés, siete veces campeón y máximo ganador de carreras de la historia, podría plantearse ya a sus 38 años.

Un desafío que, por otra parte, sería insuperable de lograrlo. Ganar el octavo campeonato del mundo con la escudería más laureada de todos los tiempos, desempatando con el gran icono ferrarista Michael Schumacher, y devolviendo al 'cavallino rampante' a un hipotético mundial de constructores casi dos décadas después. Un escenario idílico que ha sido a grandes rasgos el principal detonante para el inesperado cambio de aires de Hamilton.

Desde el anuncio oficial, el piloto británico no se había pronunciado sobre su sorprendente movimiento, pero este sábado ha dejado claro lo que piensa: "Han sido unos días locos y llenos de emociones muy diversas, pero como todos sabéis, después de 11 años increíbles en el equipo Mercedes ha llegado el momento de comenzar un nuevo capítulo en mi vida y me uniré a la Ferrari en 2025".

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El heptacampeón del mundo se siente "increíblemente afortunado" por la oportunidad, más allá del espectacular salario que recibirá del equipo italiano, ya que podrá cumplir el último sueño que le quedaba como piloto del 'Gran Circo': "Después de lograr cosas con Mercedes que sólo podía soñar cuando era niño, ahora tengo la oportunidad de cumplir otro sueño de la infancia pilotando con el rojo de Ferrari".

Antes de profundizar en su ilusión por pilotar para Ferrari, el sueño que todo piloto ha tenido alguna vez, Hamilton también ha tenido palabras de cariño para Mercedes, donde obtuvo seis de sus campeonatos y batió todos los récords posibles, escribiendo su propia leyenda: "Estoy increíblemente orgulloso de todo lo que hemos logrado juntos y muy agradecido por el arduo trabajo y la dedicación de todas las personas con las que he trabajado a lo largo de los años. Han sido una gran parte de mi vida desde que tenía 13 años, esta ha sido la decisión más difícil de tomar de mi carrera".

En este sentido, destacó al 'Team Principal' Toto Wolff, "por su amistad, orientación y liderazgo" y por todos los momentos compartidos: "Juntos hemos ganado títulos, batido récords y nos hemos convertido en la asociación piloto-equipo más exitosa en la historia de la F1. Y, por supuesto, no puedo olvidar a Niki (Lauda), que fue un gran seguidor y a quien todavía extraño todos los días".

"Pero es el momento adecuado para hacer un cambio y asumir un nuevo desafío. Todavía recuerdo la sensación de dar un salto de fe hacia lo desconocido cuando me uní a Mercedes por primera vez en 2013. Sé que algunas personas no lo entendieron en ese momento, pero hice bien en dar el paso entonces y es la sensación que tengo de nuevo ahora. Estoy emocionado de ver qué puedo aportar a esta nueva oportunidad y qué podemos hacer juntos", se ha sincerado Hamilton.

De todos modos, ha dejado claro que no está "en este momento pensando en 2025", ya que tiene por delante toda una temporada que ni siquiera ha empezado: "Mi atención se centra en la próxima temporada y en volver a la pista con Mercedes. Estoy más motivado que nunca, más en forma y concentrado que nunca y quiero ayudar a Mercedes a ganar una vez más. Estoy cien por cien comprometido con el trabajo que necesito hacer y decidido a terminar mi asociación con el equipo en lo más alto".

Lo que no especificó antes de concluir dando las gracias, y deberá tener en cuenta su sucesor en Mercedes, es si había alguna otra razón para marcharse, en especial relacionada con el futuro de la escudería y del monoplaza. "Gracias a todos los que habéis estado en este viaje conmigo, todos me habéis animado mientras perseguía mis sueños y espero poder seguir haciéndoos sentir orgullosos. Como siempre, os envío mi amor y energía positiva", sentenció el piloto británico.