La vida de Max Norman, exfutbolista del Manchester City o Tranmere Rovers, ha cambiado de forma fulgurante tras haber sido condenado a cuatro años y medio de cárcel después de que las autoridades encontraran en su domicilio drogas por valor de 60.000 euros y, además, se le cayesen de su ropa interior unas 80 dosis de crack.
"Fuiste extremadamente irresponsable al continuar en este mundo después de tu primer arresto. Luego llegó el segundo y eso empeora mucho tu situación", añadió el juez encargado del caso a Max, haciendo referencia a las distintas detenciones anteriores del exfutbolista de 25 años, según informan los medios locales.
Norman, que sufre trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH), ya había sido arrestado por las autoridades por poseer cocaína y heroína. Además, en el juicio admitió "estar involucrado en el suministro de cannabis".
Un pasado glorioso
Max Norman, en sus inicios futbolísticos, se formó en las canteras del Manchester City y Wigan Athletic antes de asombrar al mundo del fútbol y dar el salto a equipos profesionales como el Tranmere Rovers o el Morecambe, según indicó el Daily Mail. Asimismo, el Alanyaspor, mítico equipo de Turquía, también puso sus ojos en el habilidoso delantero para ficharlo en el verano del 2019.
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