Las ventanas FIFA para organizar partidos de selecciones nacionales son un problema para los clubes y cada día que pasa el conflicto es más evidente. Jugadores que recorren miles de kilómetros sin parar durante dos semanas en plena temporada, mientras siguen cobrando de sus clubes, para acabar regresando con demasiada fatiga y carga de trabajo a sus respectivas disciplinas, en algunos casos lesionados.
Si a ello se le suma la mala fortuna que está acompañando al Real Madrid en este inicio de temporada con las lesiones, nos queda una enfermería tan colapsada como la del equipo blanco. De hecho, con los añadidos que volverán lesionados de sus compromisos internacionales, a Carlo Ancelotti le tocará improvisar para paliar las nueve bajas que sufre... y que podrían seguir creciendo en lo que resta de parón.
Así está la enfermería del Real Madrid
Thibaut Courtois. El portero belga fue la primera baja sensible de la temporada para el Real Madrid. Con la Liga aún por comenzar, en pleno agosto, el guardameta se rompió en un entrenamiento en Valdebebas el ligamento cruzado anterior de la pierna izquierda, lleva desde entonces apartado del equipo y recuperándose. Desde entonces, estará de baja entre 7 y 9 meses después de haber pasado por el quirófano. Es decir, podría regresar en el tramo final del año y de manera progresiva, pero sin demasiadas garantías.
Kepa Arrizabalaga. El que estaba llamado a ser el sustituto de Courtois también sufrió la mala suerte de las lesiones después de haberse asentado en el arco blanco. Ya se había acomodado entre los palos de la meta merengue, pero calentando antes del partido de Champions en el Santiago Bernabéu contra el Sporting de Braga sufrió una lesión en el músculo aductor largo del muslo derecho que le impidió jugar y le tendrá en el dique seco hasta finales de mes.
Éder Militao. Otro caso idéntico al de Courtois, con quien comparte la dolencia que sufre. El defensa brasileño realizó un mal gesto en San Mamés, en la jornada inaugural de LaLiga, y también se dañó el ligamento cruzado anterior. Su recuperación avanza progresivamente, a más velocidad que la del belga, y en el Real Madrid esperan incluso que se puedan acortar alguno de los plazos. En principio no volverá hasta el mes de marzo o abril.
Aurélien Tchouameni. Aunque algunos acusaron a Gavi de haberle lesionado, lo cierto es que el pivote francés se lesionó en el Clásico de manera fortuita y por su cuenta, como él mismo confirmó en redes sociales. En su caso, sufrió una fractura por estrés en el segundo metatarsiano del pie derecho que aún no sabe si necesitará cirugía, y que le obligará a estar fuera de los terrenos de juego entre 6 y 8 semanas. En principio, no se le espera hasta comienzos de 2024.
Eduardo Camavinga. Otro centrocampista francés lesionado para el Real Madrid y para su selección, y primera víctima madridista de este parón de selecciones. El caso del joven mediocampista galo es el más indignante para los blancos, ya que sufrió una rotura del ligamento lateral externo en su rodilla derecha por culpa de su compañero Ousmane Dembélé, que le golpeó en un entrenamiento con 'Les Bleus'. Camavinga volvió de inmediato a Madrid para seguir siendo examinado, y se perderá de dos a tres meses de competición.
Dani Ceballos. El caso del sevillano es delicado porque más que estar lesionado, constantemente recae de las mismas dolencias. En este caso, se quedó fuera del stage de pretemporada, pudo jugar algunos minutos, y ahora sufre una tensión distal del bíceps femoral derecho que al menos le podría dejar volver antes de que acabe este mes de noviembre. Ancelotti le necesita para un centro del campo huérfano de efectivos.
Arda Güler. Aunque los casos de Courtois o Militao sean más graves o Camavinga y Tchouameni sean vitales para el esquema de 'Carletto', lo cierto es que la baja del turco es la que más frustra al madridismo, deseoso de ver su debut y de disfrutar de la calidad que le presuponen. Acumula tres lesiones con paso por el quirófano incluido, y esta vez sufre una lesión en el cuádriceps derecho que le mantendrá fuera hasta mediados de diciembre cuando más cerca parecía su estreno.
Jude Bellingham. Sufrió una fea caída ante el Rayo Vallecano sobre su hombro que le provocó una luxación. Se probó, no pudo, y después de perderse algún partido más tuvo que renunciar también a Inglaterra en este parón por miedo a empeorar. Además, su lesión es la que menor gravedad reviste y no quería arriesgar, porque podría regresar cuando acabe el parón para seguir guiando a un Madrid que le necesitará.
Vinícius Jr. Otro ejemplo como el de Camavinga, aunque en su caso al menos no fue culpa de un compañero de su propio equipo. Ante Colombia, Davinson Sánchez arremetió contra el '7' blanco con una entrada muy fea en el minuto 27 que terminó con rotura del bíceps femoral para Vini. Un percance que ya sufrió este mismo año ante el Celta, del que todavía venía recuperándose, y que mermará sus prestaciones y las de todo el Real Madrid en próximas fechas.
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