Aunque la hazaña de la selección española femenina de fútbol de ganar su primer Mundial debería ser el tema central en las conversaciones a lo largo y ancho de todo el país, tras la final no se habla de otra cosa: el incómodo momento del beso en la boca de Luis Rubiales a Jenni Hermoso en el podio.

El gesto del presidente de la Real Federación Española de Fútbol ha dado mucho que hablar y ha generado muchas críticas en redes sociales y hasta la prensa extranjera se ha hecho eco de él. Pero la opinión más importante, y la crítica, ha sido finalmente la de la propia Hermoso, que ha sido clara y rotunda antes sus compañeras: ni le ha gustado ni ha podido evitarlo.

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En un vídeo obtenido de un directo de la propia Hermoso en el vestuario se ve cómo la jugadora del Pachuca mexicano dialoga con sus compañeras y con el equipo técnico sobre la anécdota.

Ante los comentarios de estos, la jugadora madrileña dice "¿Pero qué hago yo? ¡Eh! ¡Pero no me ha gustado!". Una opinión que viene a confirmar lo que muchos han criticado en redes: una acto fuera de lugar del máximo responsable de la Federación Española de Fútbol.

La delantera de la selección ha intentado quitar importancia al asunto poco después y en declaraciones facilitadas por la RFEF se ha referido al momento como un "gesto mutuo totalmente espontáneo", "de amistad y gratitud".

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"Ha sido un gesto mutuo totalmente espontáneo por la alegría inmensa que da ganar un Mundial. El presi y yo tenemos una gran relación, su comportamiento con todas nosotras ha sido de diez y fue un gesto natural de cariño y agradecimiento", dijo en declaraciones facilitadas por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). "No se puede dar más vueltas a un gesto de amistad y gratitud, hemos ganado un Mundial y no vamos a desviarnos de lo importante", añadió.

En otro vídeo, también de celebración en el vestuario de las recién proclamadas campeonas del mundo, correspondiente a un directo de la azulgrana Salma Paralluelo, se ve al presidente de la RFEF en el vestuario.

Durante el vídeo, Rubiales anuncia que como premio por su brillante victoria, la Federación iba a regalar a las jugadoras un viaje a Ibiza, a lo que las futbolistas han respondido con júbilo.

Pero sorprendentemente, Luis Rubiales ha proseguido con las referencias a su momento con Hermoso en la entrega de trofeos. Así, el presidente de la Federación ha dicho: "En Ibiza celebramos la boda de Jenni y Luis Rubiales", sorprendiendo a todos.