Más de un mes después de anunciarse su fichaje por el Al-Ittihad, Karim Benzema ha debutado este jueves con la camiseta del equipo saudí. Y será una noche difícil de olvidar tanto para los aficionados como para el delantero francés, que fue trascendental en la victoria ante el Esperance de Túnez.

El exjugador del Real Madrid participó en los dos tantos del Al-Ittihad, primero como asistente y luego como goleador, en ese primer partido de la fase de grupos de la Copa de Campeones Árabe.

Benzema formó parte del once inicial de Nuno Espirito Santo y a los 30 minutos, cuando el Al-Ittihad iba por debajo en el marcador, tiró del carro y asistió a Abderrazak Hamdallah para poner las tablas.

Sin embargo, su buen hacer no quedó ahí. Tras el descanso, a los diez minutos de volver a pisar el terreno de juego, el galo se sacó de la chistera un zapatazo desde fuera del área contra el que no pudo hacer nada el guardameta y que, además de suponer la victoria de su equipo, ya ha dado la vuelta al mundo.

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Poco después, en el 71, Benzema fue sustituido por Sultan Farhan y se llevó la ovación de todo el estadio Rey Fahd, que gracias a él celebraron la primera victoria del conjunto árabe en esta fase de grupos de la Champions League árabe.