El Real Madrid se despide de la Liga hasta diciembre con una victoria discreta ante el Cádiz en el Bernabéu 

Real Madrid - Cádiz
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EFE
Real Madrid - Cádiz

Amarrar los tres puntos para que el Barcelona no se alejara aún más en la clasificación era el objetivo del Real Madrid, y lo logró. Sin brillantez, ni tampoco buen juego, y sí con mucho sufrimiento, pero logró una victoria fundamental ante un Cádiz que plantó cara y que estuvo muy, muy cerca de sacar algo positivo del Santiago Bernabéu en el último partido de LaLiga antes del parón por el Mundial de Qatar.

Pide el conjunto blanco un parón urgentemente. Su fútbol no es no ya el de hace unos meses, tampoco el de hace unas semanas, y ganar a cualquier rival se convierte en un mundo. Así, un Cádiz ordenado y duro en defensa fue suficiente para complicarle y mucho la vida a los de Ancelotti, que dejó de lado los experimentos y salió con un once de gala, solo con la novedad de Lucas Vázquez por Carvajal en el lateral derecho.

El Madrid estaba atascado, frío, y la mejor ocasión en el comienzo del choque fue gaditana, un latigazo de Lozano que se marchó alto tras rozar el larguero. Los nervios aparecieron en el Bernabéu, conscientes de que un tercer tropiezo consecutivo –tras el empate ante el Girona y la derrota en Vallecas– era un durísimo palo.

A falta de juego, el Madrid le echó ganas, eso nadie se lo puede reprochar. Valverde empujó por la derecha y Vinícius por la izquierda, aunque el premio llegó en un córner. Kroos puso una rosca maravillosa tras un rechace y Militao, llegando desde atrás para romper el fuera de juego, cabeceó a placer.

Tenía que animarse un poco más el Cádiz en la segunda parte, y una gran jugada gaditana acabó en asistencia del Choco Lozano a Rubén Sobrino que el delantero español no aprovechó, se encontró con Courtois. La respuesta, inmediata, llegó en una contra a la velocidad de la luz que Fede Valverde no finalizó, Isaac Carcelén evitó el gol con una pierna salvadora.

Sin demasiado buen juego, el segundo tanto llegó tras otro rechace. Centró Vinícius, rebotó el balón en la pierna de un rival y Kroos, de impresionante volea, marcó uno de los goles de la jornada.

Pudo sentenciar Modric a puerta vacía en el remate más fácil de su carrera, pero el croata falló incomprensiblemente ante el asombro del Bernabéu. Y justo después, un error de Courtois al blocar el balón lo dejaba franco para que Lucas Pérez diera esperanzas a los gaditanos.

De repente, había partido y la sensación era que el Cádiz iba a tener la suya. Y la tuvo. Pacha Espino remató un balón suelto en el área y su cabezazo se fue alto por poco. El Madrid se salvó y se va de vacaciones, que las necesita.

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