DeJon Jarreau, uno de los bases de Houston Cougars, equipo perteneciente a la NCAA, ha protagonizado una de las jugadas más feas de lo que va de 2020 en el baloncesto universitario. El joven ha dejado una imagen que ha traído a la memoria el ya cais mítico mordisco de Mike Tyson a Evander Holyfield. 

Durante la segunda mitad del partido de la liga universitaria entre Cougars y Cincinnati, Keith Williams y Jarreau pugnaban por un balón cuando el base del equipo de Houston caía al suelo, impactando contra el gemelo del contrario. No se le ocurrió otra cosa que morder a su rival. Esta acción, calificada de flagrante tipo II, propició su expulsión del partido.

Su equipo cayó derrotado por 64-62, con Jarreau aportando cinco puntos, seis asistencias y cuatro rebotes antes de abandonar el partido de forma prematura. 

Su entrenador, Kelvin Sampson, se mostró crítico con la decisión de los árbitros a la hora de expulsar al chico: "No hubo mordisco. Hubo un supuesto mordisco. Vi las imágenes tres veces para asegurarme de que estaba en lo correcto".