Leon, un niño de apenas cuatro años, sorprendió a su madre cuando le pidió que le pintara la cara de blanco, no quería ser negro. Como recoge la cadena BBC, la reacción de los padres es fundamental en estas ocasiones y la respuesta de Alison, madre de Leon, estuvo a la altura.
Cuando Alison fue a recogerle a casa de una amiga, se encontró con una fotografía en la que aparecía su hijo embadurnado de crema hidratante. No era la primera vez que Leon había mostrado sus ganas de ser blanco. En otra ocasión, al poco de comenzar la escuela, le había pedido a su madre que le pintara la cara de blanco porque no quería ser negro.
La madre considera que es importante que los niños se vean representados en su entorno. Como respuesta a la petición de su hijo, Alison llevó al colegio de Leon libros con protagonistas negros.
Aunque Alison se mostró preocupada, no reaccionó enfadada. "¿Por qué no quieres ser negro? Mamá y papá son negros, casi todas las personas a las que amas son negras", fue su respuesta.
Los expertos recomiendan que los niños se expresen y que los padres no muestren rechazo o incredulidad sea cual sea la acción del niño, es la ocasión para hablar del tema en cuestión.
"En cualquier momento que quiera hablar del tema de volverse blanco sabrá que no reaccionaré mal, no me enfadaré, simplemente le diré: ¿qué estás pensando?", afirmó Alison.
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