El análisis de los delitos contra la libertad sexual denunciados en Navarra en los meses de septiembre y octubre de 2018 presenta valores inferiores respecto a los mismos meses de 2017, y especialmente respecto a los dos meses anteriores, según ha informado la Policía Foral.

El mayor número de hechos denunciados corresponde a los abusos sexuales, seguidos de las agresiones sexuales y las agresiones sexuales con penetración.

Durante los meses de septiembre y octubre, se ha tenido conocimiento de la ocurrencia de hechos en las zonas policiales de Pamplona, Tafalla y Tudela. De los nueve hechos que se registran en la zona policial de Pamplona, cinco se han localizado en la capital, registrándose tres en el Casco Antiguo, uno en Iturrama y uno en la Milagrosa.

Los hechos se han concentrado principalmente durante los días del fin de semana si bien se ha observado que atendiendo al total de hechos la franja horaria de mayor incidencia ha sido la que abarca el horario de 14 a 18 horas. La Policía Foral destaca que dos de los hechos se han producido en el periodo de fiestas patronales de dos localidades, Cascante y San Adrián, y uno durante la festividad del Pilar.

Atendiendo al tipo de lugar en el que se producen los hechos, durante este periodo han primado aquellos desarrollados en un ambiente público, a la vista de testigos. Cabe destacar que dos de los hechos que han tenido lugar en Pamplona, se han producido en el entorno de una discoteca.

En cuanto a la relación existente entre el autor y la víctima, puede apreciarse un cambio respecto al periodo anterior. De los datos tratados puede verse que en su mayoría la víctima no tenía relación con el autor.

Mayoritariamente los autores han sido varones mayores de edad de nacionalidad española que han actuado en solitario. El mayor número de autores se encuentran en una franja de edad de entre 18-25 años. Las víctimas durante este periodo han sido mujeres, mayores de edad y fundamentalmente de origen y nacionalidad española.

La Policía Foral recomienda a las víctimas de un delito contra la libertad sexual que contacten con el 112 y apunta que denunciando se evita que se puedan cometer otros delitos contra la misma víctima u otras personas, ya que el agresor podrá ser procesado penalmente.

Según explica la Policía Foral, denunciando una agresión sexual, la víctima recibirá apoyo psicológico y jurídico, por profesionales especializados y la protección policial que sea necesaria.