El principal objetivo es asegurar una atención sanitaria "de calidad" a la ciudadanía a través de servicios óptimos. Los once colegios profesionales que conforman Uprosama, que representan diversos ámbitos de la salud, aseguran que las medidas "reducirían las listas de espera y los costes de la atención especializada".

Actualmente, según los datos recopilados por Uprosama, "existe una falta de profesionales sanitarios en los centros de salud y hospitalarios de todas las provincias andaluzas". Asimismo, han añadido que la efectividad del sistema está cada vez "más mermada por el déficit en las plantillas".

Los médicos de familia, que son uno de los perfiles profesionales sanitarios más cercanos a la población, critican "una saturación diaria en su trabajo". El Sindicato Médico de Málaga indica que en la provincia hay una carencia de 128 médicos de familia.

El déficit es aún "más notorio", han explicado a través de un comunicado, en otro de los colectivos con más contacto habitual con la ciudadanía, la enfermería. El Colegio de Enfermería de Málaga cifra una falta de más de 2.000 profesionales en la provincia.

La institución colegial recuerda que el Consejo General de Enfermería realizó un informe en 2015 que evidenció cómo Andalucía está a la cola de España en número de enfermeros por habitantes, siendo Málaga y Granada las provincias donde se hace más notoria la diferencia. Ante datos como estos, es necesario realizar una adecuación de las ratios "número de profesionales por habitante".

Por su parte, el Colegio de Fisioterapeutas de Andalucía, basándose en una ratio recomendada por la Organización Mundial de la Salud, señala que debería haber unos 400 fisioterapeutas más en la sanidad pública en la provincia de Málaga. A nivel regional, se necesitarían 2.444 fisioterapeutas más.

En otros colectivos profesionales el déficit es aún más relevante en términos porcentuales. Así, el Colegio de Logopedas de Andalucía denuncia que es necesario incrementar la plantilla en un 95 por ciento, ya que actualmente únicamente hay dos en la provincia de Málaga; mientras que el Colegio de Ópticos-Optometristas de Andalucía y el Colegio de Podólogos de Andalucía lamentan que pese se lleva solicitando desde hace años la inclusión de sus profesionales como personal estatutario del Sistema Sanitario Público Andaluz, en estos momentos aún no se ha incluido la figura de este profesional ni en Málaga ni en Andalucía, por lo que su déficit es del 100 por ciento.

En los mismos términos, aunque en este caso aún no está ni siquiera reconocido por la administración, se encuentra el Colegio de Dietistas-Nutricionistas de Andalucía, "que reclama la inclusión de la profesión en el catálogo del SAS".

En cuanto al Colegio de Psicólogos de Andalucía Oriental, mantiene su reclamación a la Consejería de Salud de la Junta de que incluyan los psicólogos en la Atención Primaria, al igual que sucede en otras comunidades como Madrid y Barcelona, "para dar adecuada respuesta a las necesidades de una sociedad, que reclama tratamientos proporcionados y correctos a patologías que hasta ahora no están recibiendo ni teniendo acceso a tratamientos psicológicos".

MÁS TRABAJADORES

A su juicio, la contratación de más trabajadores permitiría una atención "más eficaz y evitaría la sobrecarga" soportada a día de hoy por muchos de ellos. Habría, han señalado, "un notable beneficio para el ciudadano, ya que se reducirían las listas de espera. Además, es preciso incorporar nuevos perfiles profesionales".

Tal y como se explicó anteriormente, en el SAS no existe la categoría profesional a nivel estatuario de Dietistas-Nutricionistas ni de Ópticos-Optometristas.

Como consecuencia, han precisado, los ciudadanos se ven obligados a costear de su propio bolsillo servicios sanitarios como tratamientos dietéticos-nutricionales o determinados tratamientos fisioterapéuticos. Éstos son únicamente accesibles para quienes pueden costearlos en la sanidad privada.

Por todo ello, han incidido en que las condiciones contractuales deben mejorarse, "hay que apostar por el valioso potencial de los profesionales sanitarios andaluces".

"La ausencia de empleo de calidad ha provocado que gran parte se haya ido a otros países a trabajar. La administración debe promover un plan de recuperación para Andalucía. Casi el 80 por ciento de los médicos malagueños que se marcharon entre 2007 y 2017 asegura que volvería si las condiciones laborales fueran buenas", han remarcado.

La construcción de nuevos centros hospitalarios también "es clave" para acabar con la saturación. Desde hace años, se está viviendo una creciente demanda de los ciudadanos andaluces. En Málaga capital, profesionales sanitarios, expertos y sociedad reclamaban desde hace tiempo un tercer hospital.

En este sentido, han señalado que recientemente, la Junta de Andalucía anunció su construcción, fijando como fecha de apertura el año 2024. Las instituciones colegiales de Uprosama instan a la Junta "a cumplir su compromiso".

Por último, el presidente de Uprosama, Francisco Florido, ha asegurado, en representación de todos los colegios que "es completamente necesario que el tercer hospital de Málaga no se quede en papel mojado", ha concluido.