Aitor y Santiago quieren cambiarse de colegio. Tienen ocho años y, según sus madres, llevan meses sufriendo las agresiones de un grupo de tres compañeros de clase.

Dice la madre de Aitor que las agresiones empezaron con el inicio de curso. Pero lo más grave fue cuando le rompieron la ortodoncia de un golpe en la cara. A Santiago el mismo grupo de niños empezó a pegarle el año pasado. Un día, llegó a casa con el cuerpo lleno de morados.

Pero los ataques a estos niños no son casos aislado. Tres niños de ocho años tienen amedrentados a los compañeros de tercero de primaria. Son de origen magrebí y las madres se quejan de que de momento los profesores no han sabido acabar con estas agresiones. Las protestas han llegado hasta el departamento de Educación que ahora dice que está estudiando el problema y busca soluciones.

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