El informe destaca el excelente comportamiento de la economía aragonesa en el primer lustro del siglo xxi y confirma que la tendencia sigue al alza, aunque con cierta moderación. En cinco años, el producto interior bruto (PIB), que mide la riqueza básica de una región, se ha incrementado un 14,36%. La media nacional está en el 14,72%.

Estas cifras sitúan ya a Zaragoza como la octava provincia más rica de España, por detrás de Álava, Madrid, Navarra, Vizcaya, Tarragona, Girona y Guipúzcoa. Con respecto a la Europa de los 15, Aragón ha mejorado su nivel de renta, que ya supera a la media europea en nueve puntos.

Servicios y construcción

La bonanza económica de Aragón se encuentra principalmente en el sector servicios, que entre 2000 y 2005 ha generado 37.570 puestos de trabajo en el sector privado y 4.400 en el público.

La valentía de las empresas a la hora de aumentar plantillas y estabilizar empleo es una de las principales causas del crecimiento económico. La intensidad en la creación de empleo es una de las características distintivas del arranque del siglo XXI, según constata el informe.

El sector de la construcción ha sido, gracias al boom inmobiliario, el segundo que más puestos de trabajo ha creado, 2.916. El estudio destaca también la importancia que ha tenido la inmigración en la bonanza laboral, sobre todo en el servicio doméstico y de hostelería.

4 preguntas sobre...

La economía aragonesa

1¿Qué peso tiene la economía de Aragón en España? El PIB aragonés se situó en 2005 en 23.448 millones de euros, lo que supone el 3,20% del PIB nacional. Este porcentaje es similar al del año 2000 (3,21% del total).

2 ¿Cuáles son las previsiones para este año? Los expertos estiman que el PIB crecerá en torno a un 3%, mientras que en Europa el incremento rondará el 2%.

3 ¿Cuál ha sido el principal motor del mercado y del empleo? El sector privado es el que tira en la actualidad de la economía aragonesa. Por primera vez, la agricultura también ha tenido un balance positivo.

4 ¿Cómo ha evolucionado el ahorro? El ahorro relativo de las familias se ha reducido de un 9,83% en 2000 a un 9,46% en 2005. La causa está en el endeudamiento de las familias.